La dedicatoria más especial de Saúl
El centrocampista marcó ante el Celtic y celebró haciendo una ‘E’ con sus manos. El destinatario era su hijo recién nacido: Enzo.
Saúl Ñíguez fue el último goleador de la noche europea del Atlético frente al Celtic. El ilicitano entró en el minuto 65 al encuentro y aprovechó la buena dinámica del equipo en el partido para anotar su primer tanto de la temporada. Un gol que tuvo una dedicatoria especial y que explicaba los motivos de su ausencia en el entrenamiento el pasado domingo. En la celebración realizó una ‘E’ con sus manos y respondía al nombre de Enzo, su hijo recién nacido que ha llegado con un gol bajo el brazo.
El centrocampista nacido en Elche recibía un balón franco dentro del área y fusilaba a Hart que paró el cuero en el interior de la portería. Era el sexto tanto del partido, pero la celebración fue especial para el 8, puesto que iba dedicado para su hijo recién nacido. Su mano derecha hacía una ‘E’ y esta tarde, el centrocampista subía un tweet con el siguiente texto: “La celebración del gol de ayer es la primera vez que la hago en mi vida y tiene una explicación muy especial para mí que en un ratito la publicaré”.
Posteriormente, el canterano aprovechaba para anunciar el nacimiento de su hijo. “Bienvenido ENZO ÑÍGUEZ SALAMANCA. No podemos estar más felices de dar la bienvenida a Enzo a nuestra familia. Su energía ya se ha notado desde el día que nació. Por eso ayer fue un día muy especial que haya podido marcar un gol y dedicarle su primer golito”, un texto que acompañaba una foto del futbolista junto a su mujer e hijos.
Griezmann y Giménez adelantaron la sorpresa
El vestuario del Atlético de Madrid es una auténtica familia y eso se ve en las relaciones que tienen los jugadores. De hecho, ayer se pudo comprobar el buen rollo que existe en los interiores del Metropolitano. Cuando Saúl marcó, Griezmann y Giménez estaban en el banquillo y empezaron a hacer la ‘E’ que hizo el centrocampista en su celebración. Pero eso no es todo, el francés y el uruguayo empezaron a gritar: “Enzo”. Un nombre que desvelaba los motivos de la ausencia del ilicitano el pasado lunes en el entrenamiento. Es decir, Antoine y José María fastidiaron la sorpresa del nacimiento del hijo de Saúl.
La alegría extradeportiva de Saúl está coincidiendo con su gran momento de forma. El jugador ha vuelto a encontrar la regularidad que tuvo en sus mejores temporadas y esta campaña ya suma 835 minutos, en los que ha logrado un gol y cinco asistencias. Es una pieza importante para Simeone y pese a no ser titular indiscutible, es un jugador que participa en todos los partidos. Ha vuelto al centro del campo, su posición natural, y en ese lugar su rendimiento se ve potenciado de forma sustancial.
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