Kroos aprieta a Ancelotti
Pese a la falta de minutos, el alemán está siendo decisivo con sus participaciones, especialmente en las segundas partes. El Madrid se sirve de su acierto en el pase (94,32%).
Mejora todo lo que toca, y la toca mucho, muchísimo. Kroos es el cuarto jugador de la plantilla que más pases registra del Madrid: 317. Solo Alaba (398), Tchouaméni (379) y Rüdiger (353) le superan, pero para ello han necesitado 263′, 173′ y 213′ minutos más, respectivamente, que el alemán. Las estadísticas hablan por sí solas. Y es que Toni está empeñado en hacerle ver a Ancelotti que la solución a algunos de los principales males del Madrid en este inicio de temporada (falta de creatividad, clarividencia entre líneas, orden en la medular...) pasa por sus botas.
Así lo ha demostrado en los ratos que le ha dado el italiano y así lo reafirman los últimos partidos. Ante Getafe (45′) y Union Berlin (24′), entró al campo en la segunda parte con el equipo remando a contracorriente y contribuyó enormemente a la victoria final. Frente a los de Bordalás, revolucionó el encuentro a base de cambios de juego y peligrosas filtraciones y ante los alemanes permitió liberar a Modric. Con él en el campo, el Madrid se desmelenó definitivamente en busca de la victoria. De igual modo, en sus únicas dos titularidades del curso, ante Almería y Real Sociedad, dejó patente que su criterio y contribución distributiva siguen intactas. Ante los andaluces, especialmente, con una asistencia a Bellingham para darle la vuelta al marcador.
Su entrada es una bombona de oxígeno para el resto de sus compañeros, pero especialmente para el croata, que con su principal escudero al lado, se desenvuelve mejor. Kroos le permite acercarse con más frecuencia y despreocupación a la zona en la que pasan las cosas, el último tercio. Tanto es así que el de Zadar acabó el partido de este miércoles como el jugador que más pases completó del equipo en esa parte del campo: 41. La fiabilidad del 8 blanco en la distribución es uno de los pilares en los que se apoya el Madrid cuando reina el desconcierto o cunde la urgencia. No en vano, es el jugador de la plantilla que más precisión registra en el pase: 94,32% (sin contar con Militão, cuya muestra de un solo partido no se puede considerar igual de válida).
Incisivo
Una participación para nada estéril. De hecho, tiende a ser dañina. Prueba de ello es que el alemán es también el segundo jugador blanco que más pases suma en el último tercio (55), a tan sólo uno de Tchouaméni (56). Vistos los datos, no es de extrañar que Carletto haya recurrido a él con frecuencia para ganar los partidos, pero a eso hay que sumarle las sensaciones que transmite. Cumplirá 34 años el próximo mes de enero, pero se le percibe dinámico, enérgico, inspirado y con confianza. Cualidades que en ocasiones el equipo echa en falta en el otro pivote del equipo, el propio Tchouaméni.
Las características de ambos son distintas, es cierto, pero los dos últimos partidos inclinan la balanza del lado del ex del Bayern. Al menos, de cara a partidos como el estreno en Champions, frente a rivales encajonados en su campo que exigen creatividad. La dureza del calendario y la necesidad de buen pie convergen en un previsible mayor protagonismo del alemán en las próximas semanas. “En este período que hemos jugado sólo un partido a la semana he puesto a los jóvenes para ver qué pueden aportar. Lo han hecho bien... Yo no necesito dar minutos a Modric y Kroos para ver qué pueden aportar, lo sé perfectamente. Lo van a aportar también este año”, comentó Ancelotti en la previa del choque ante la Real. El italiano es consciente de las armas de las que dispone, sí, pero Toni le obsequia con un recordatorio cada partido.