Loca Academia de goleadores

El Atlético de la juventud y talento quiere el Top-6 de la Youth League. Tener unos octavos en ventaja y soñar con volver a llegar lejos en una Europa que no quita ojo a la Academia colchonera. Son 10 puntos de 12 y una clara apuesta por la precocidad y el fútbol ofensivo de los valores rojiblancos. Su superioridad fue enorme sobre el Union Saint-Gilloise, que solo podía celebrar cada llegada del Atlético que no culminaba con gol.

Apostaba Ángel Donato por un esquema enormemente ofensivo. Jesús Barrios a la izquierda, Cubo y Vinatea escoltando a Sergio Esteban como doble mediapunta. Mucho movimiento para desconcertar a la defensa belga y alta responsabilidad para Javi Tena y Taufik en el doble pivote a la hora de cubrir a sus cuatro delanteros. Y desde muy pronto el Atlético comenzó a encontrar los huecos. Los desmarques de Sergio Esteban, que la tuvo tras los envíos de Cubo y Vinatea, y la gran ocasión de Jesús Barrios que apostó por la potencia en lugar de la colocación en el mano a mano.

El Union Saint Gilloise no inquietaba a Piqueras, titular por la ausencia de un Dani Rubio que se encuentra citado por el primer equipo. Solo faltaba conocer cuándo y quién rompería la igualada entre los delanteros rojiblancos. Fue Sergio Esteban, tras un balón colgado y ganado en primera instancia por Jorge Domínguez y rematado de prácticamente chilena con maestría por el nueve. Capítulo aparte merece el central de 15 años que manda, domina, gana duelos y saca la pelota jugada desde atrás. Uno de los nombres marcados con más futuro en la Academia.

Como el de Miguel Cubo. El 10 hizo el segundo recuperando el balón desde el suelo, levantándose, con pisada y puntera a la esquina de la portería. Puro talento del jugador del 2008 que viene haciendo la mili para Fernando Torres en Primera RFEF. Un recurso en el remate de los que valen mucho dinero. El descanso llegaba como bálsamo para los belgas, que sufrían sin saber cómo intentar taponar las vías de agua que le venían por todos los lados.

Pero el paso por vestuarios no cambiaría el guion. El Atlético enormemente superior, rondando una y otra vez la frontal del área. Le costaría otra vez conseguir el gol, con el kétchup otra vez atascado. Pero sería de nuevo Sergio Esteban el encargado de reabrir el agujero. El pase de Vinatea en el momento justo y el remate cruzado a la base del palo. Académico. Al partido le quedaban 25 minutos y era el momento de ver a Rubén Gómez en acción. El zurdo que a sus 16 años desprende talento en cada toque a la pelota. Tendría Sergio Esteban su hat-trick en un remate que, tras no embocarla Rubén de primeras, le cayó al nueve para estamparla contra el larguero. Y era el momento para que Jesús Barrios no se fuese de vacío. Recuperó Cubo ante la blanda defensa belga y el balón le quedó al extremo para su noveno gol del curso.

Era la hora de hacer sangre, por mucho que un error de Saúl desembocase en la roja directa para Miguel Gil por frenar a Keita cuando encaraba portería. Uno menos, falta al palo para generar un susto que duró apenas segundos. Lo que tardó el Atlético en volver a encontrar el filón por la derecha. El balón de Rubén Gómez buscando a Fitzgerald, el toque del medio y Obama haciendo el quinto completamente solo. Una fiesta colchonera ante una defensa blandísima que en ningún momento fue capaz de hacer frente al talento ofensivo de los locales. Manita, goleada y a seguir soñando en alto. Este Atlético tiene talento, ganas y un estilo que siempre es divertido.

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