Champions | Sparta Praga-Atlético de Madrid
El ‘no fichaje’ de Rosicky por el Atlético: de su hermano Jiri al “llegará otro mejor”
El checo, actual director deportivo del Sparta Praga, rival en Champions, estuvo muy cerca del equipo rojiblanco en 2006, pero terminó en el Arsenal
El Atlético llegó este lunes a Praga y uno de los anfitriones del equipo ha sido uno de esos futbolistas que, en su momento, pudo ser rojiblanco, pero no fue. Pero esta vez sí que por muy poco. El director deportivo del Sparta es Tomas Rosicky (Praga, 1980), exfutbolista del Arsenal, el Dortmund y el propio equipo checo, donde inició y terminó su carrera como jugador. Y en ese momento previo al salto desde Alemania a Inglaterra, el Atleti llamó con insistencia, mucha fuerza y buenos argumentos, incluso familiares, a su puerta. Pero el giro final alejó del Calderón al mediapunta.
Fue en la temporada 2005-06 cuando desde el Atlético, entrenado entonces por Bianchi, se lanzaron a por Rosicky. El futbolista había maravillado en la Euro 2004 y crecía en el Dortmund y el club madrileño tanteó su fichaje ya para el mercado de enero de 2006. Los alemanes, inmersos en una crisis económica, estaban abiertos a escuchar ofertas y había predisposición por parte del jugador. Entre otras razones, por lo que le había contado su hermano Jiri, que jugó en el Atleti B entre 1996 y 2000, en Segunda, y hoy le acompaña en la dirección deportiva bohemia. Además, Tomas quería salir porque estaba cuestionado en Alemania. Pero no hubo acuerdo entre clubes (uno ofrecía 10 millones y el otro pedía 12 mientras buscaba recambio) y las conversaciones se pospusieron hasta primavera.
“Quiero jugar en el Atlético y todo se arreglará en verano“, dijo Rosicky en febrero. ”Nosotros no tenemos ninguna oferta formal, así que no hay nada que negociar", añadían desde el Borussia. El tira y afloja seguía su curso. Se acercaba el final de la temporada y parecía todo hecho. El checo y el Atlético tenían un acuerdo desde hacía meses y el Dortmund, ya sí, admitía que era “cuestión de días" porque “las posturas están muy próximas". Los famosos flecos. El club rojiblanco, de hecho, estaba ya más pendiente de atar a Agüero, jovencísima promesa (17 años) de Independiente, y a Costinha.
El acelerón final del Arsenal
Aunque la Juventus de Nedved, el Bayern y el Arsenal enredaban tras el jugador, el Dortmund dio por bueno el pacto con el Atlético por unos 11 millones: “Solamente falta por acordar la forma en la que el Atlético pagará y en qué plazos el traspaso”. En Madrid ya se hablaba del nuevo Atleti de Aguirre, Rosicky y Agüero... hasta que todo saltó por los aires a mediados de mayo. La causa: problemas con el aval bancario. Mientras se rompían las negociaciones entre clubes, se conocía que el futbolista pasaba reconocimiento médico en Londres con el Arsenal, que abonó 12 millones.
“Tomas estaba encantado con la idea de jugar en el Atlético, estaba viendo sus partidos por la tele. Pero el Borussia se puso impaciente por el dinero, ha presionado y no esperábamos lo que ha pasado. No acabo de explicármelo“, comentaba Jiri, hermano del jugador. Una bomba de desilusión como colofón a una temporada decepcionante en la que el equipo terminó 10º en Liga. Según se apuntó desde el entorno rojiblanco, el Dortmund fue cambiando las condiciones, reclamando bonus e incluso el 20% de una futura venta, hasta que se cayó la operación. ”Traeremos a un jugador igual o mejor que Rosicky”, zanjaba Cerezo, intentando levantar los ánimos.
Maniche y Jurado, para el equipo de Aguirre
Gil Marín, para evitar más disgustos, aceleró el fichaje de Agüero y empezaba la retahíla de nombres de posibles sustitutos de Rosicky: Aimar, Raúl García (que llegó un año después), Sneijder, Zé Roberto... El Atlético finalmente ató para el centro del campo a Maniche, del Dinamo Moscú, y a Jurado, del Real Madrid.
Tomas Rosicky, por su parte, jugó diez temporadas en el Arsenal, las últimas ya muy lastrado por las lesiones. En 2016 regresó al Sparta Praga donde todo había empezado. En la primera temporada solo pudo jugar 18 minutos y en la segunda, apenas 12 partidos antes de anunciar su retirada definitiva en diciembre. “Mi cuerpo ya no puede”, se resignó el Pequeño Mozart. Apenas un año después, entró en la dirección deportiva del club donde se crio y colgó las botas. Con él en los despachos, el club pasa ahora un gran momento, campeón de las dos últimas Ligas y regreso a la Champions tras 19 años. Rosicky, que nunca jugó contra el Atleti, se encuentra en casa con el que pudo ser su equipo.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.