REAL MADRID-BORUSSIA DORTMUND | ANTON
El central de 22M€ que limpiaba la casa familiar
Waldemar Anton jugará en el Bernabéu, pero le ha costado. De padre conductor de autobús, de niño hacía las tareas domésticas y aprendió de Joselu en Hannover.
Es Dortmund una auténtica escuela para centrales (Hummels, Kohler, Wörns, Helmer, Subotic...) y el último en apuntarse a la universidad del Borussia es Waldemar Anton, con 28 años, pero en el momento más dulce de una carrera tras ser comprado por 22 millones de euros. Hoy jugará en el Bernabéu, casi la culminación de unos orígenes muy modestos. Su padre, Alex, era conductor de autobús y la mamá, Olga, cocinera. Con 2 años, llevaron a Vladimir a Alemania desde Almalyk (Uzbekistán). Sí, Vladimir. Lo de Waldemar fue una germanización posterior de su nombre. El trabajo de sus padres le obligó a arrimar el hombro desde muy pequeño. Era el que limpiaba la casa familiar al volver del cole. Se encargaba de tener lista la pequeña vivienda de alquiler para cuando llagasen sus padres del trabajo. En alguna ocasión ha dicho que ese ser el guardián del hogar le “imprimió carácter”. También le hizo crecer sin venirse arriba.
Entre otras razones, porque nunca fue un futbolista prodigio. Subió al Hannover 96, clásico equipo ascensor de la Bundesliga, con apenas 19 años y dos meses después no logró evitar el descenso a Bundesliga 2. No es la mejor manera de comenzar. Pero le vieron algo. Allí, siendo todavía canterano, había podido observar de cerca a Joselu, que estuvo un año (la 2014-15) en el club de la capital de la Baja Sajonia. En cuanto logró establecerse en el primer equipo del Hannover 96, al segundo año, compró una casa para toda la familia.
Así es Anton, un central de floración tardía. La federación uzbeka le estuvo cortejando cuando comenzó a asomar en Hannover y su valor de mercado era de apenas 100.000 euros. No cuajó. También Rusia, por el origen de sus padres, podría haber pescado. El fútbol uzbeko y el ruso perdieron y Nagelsmann y Alemania ganaron un muro para la Euro 2024.
“Eres una p... hambrienta de dinero”
El camino hacia la absoluta alemana ha sido, como todo en su carrera, lento. Perdió la final del Europeo Sub-21 de 2019 contra La Rojita de Vallejo y Ceballos aunque era suplente en aquella generación alemana, y aún así la inspiración para utilizar el 3 en su camiseta tanto con su club como con la Mannschaft le viene de España. “De siempre he sido fan de Piqué, así que parte de la decisión viene por ahí”, explicó Anton en su puesta de largo como borusser. Un fichaje que levantó ampollas en el Stuttgart. El capitán honorario del club, Guido Butchwald, le atizó duro: “Anton eligió el dinero”. Cuando el defensa visitó la ciudad el pasado 29 de septiembre, el recibimiento fue en la misma línea. Se le tildó de traidor y una pancarta captó la atención de las cámaras: ‘Anton, eres una puta hambrienta de dinero’.
En Alemania tiene fama de ser una roca y lo curioso es que sus principales enemigos están relacionados con el aire, aunque no se trata de futbolistas. En siete años y medio como profesional sólo se ha perdido ocho partidos por lesiones muy nimias, mientras que por procesos gripales, contagios de coronavirus y resfriados se perdió... también ocho encuentros. Por ahora ha escapado a la epidemia de gripe en el vestuario del Borussia que ha dejado al equipo en cuadro para el Bernabéu. Ese partido lo ha ganado.
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