CHAMPIONS (FASE LIGA) | REAL MADRID 1 - MILAN 3
1x1 del Real Madrid ante el Milan: Tchouameni sale muy tocado
Noche aciaga de Tchouameni, que se marchó pitado por el Bernabéu. La defensa es un coladero y arriba, Mbappé sigue sin ver puerta. Un desastre.
Es una crisis. Tiene que empezar a serlo, porque es evidente que lleva tiempo siéndolo. El Madrid no está y lejos de eso, está muy lejos de lo que necesita para aspirar a lo máximo. Mbappé sigue sin gol, Vinicius intermitente y la defensa, con más agujeros que un colador. Sale muy tocado Lucas Vázquez. Pero el que más, Tchouameni, al cual el Bernabéu llegó a silbar al ser sustituido (en el descanso; entró Camavinga). Blando en el primer gol y a por uvas en el segundo. Un desastre. Como el Madrid, que se jugará en Anfield mucho más de lo que se imaginaba. Y de quien el runrún, empieza a ser himno.
Titulares
Lunin: intermitente. Tan pronto se le vio endeble, como heroico. En la primera parte tuvo momentos de inseguridad, de esas paradas que recuerdan que no es un mal portero, pero tampoco es Courtois. Pero en la segunda protagonizó una parada espectacular para evitar el 1-3. Pocos reproches, pero pocos brillos también. Nota: 4.
Lucas Vázquez: sigue transmitiendo la sensación de que defensivamente no llega al listón que exigen los partidos de esta envergadura. Es trabajador como el que más, no escatima una gota de sudor, pero las flaquezas atrás son evidentes. La facilidad con la que Leao le deja atrás en el tercer gol es indigna de un campeón de Europa. O alguien que pretende serlo. El asunto empieza a ser un problema... y un agitador del debate de si debe firmarse un lateral en enero. Nota: 2.
Militao: anduvo blando en el córner del primer gol y algo descolocado en la jugada del segundo. Pero espectacular para frenar un contragolpe rossonero que pudo suponer el 1-3 antes de la hora de juego. En línea general, es evidente que no está al nivel que se le ha visto. En el tercer gol pierde la zona por completo y acaba descompensando a toda la línea defensiva. Un desastre. Nota: 3.
Rüdiger: luchador, guerrero, a lo Rambo. Pero tuvo varios momentos de descolocación que sorprenden en él. Partido malo, también por debajo de lo que ha demostrado poder ofrecer. Al menos quedará su volea para hacer el 2-3 que nunca subió al marcador. Nota: 3.
Mendy (74′): en la línea del resto de defensas, o incluso algo peor. No está a la altura de lo que puede dar. Ha pasado de que en febrero no se le hubiese regateado más de dos veces, a que le regateen más de dos veces por partido. Sintomático. Preocupante. Nota: 2.
Tchouameni (46′): probablemente el gran señalado de la noche. Falla en la cobertura del primer gol y no sigue a Morata en el segundo. Este último es el más preocupante, quedándose en tierra de nadie; ni estaba en la frontal para tapar el rechace, ni estaba con el poseedor de balón para frenar cualquier intento de pase. Sigue mal, muy mal. El Bernabéu llegó a silbarle y subió los decibelios de su enfado al escuchar su nombre por el videomarcador. Para Ancelotti es un indiscutible, pero el presente invita a pensar que debe dejar de serlo. que Camavinga, como pivote, debe tener más oportunidades. Porque Tchouameni está muy por debajo de lo que exige la marca. Nota: 1.
Valverde (46′): fue retirado al descanso, en un claro síntoma de que no se encontraba al 100% físicamente. Esto le hizo pasar más desapercibido de lo normal, sin golpear desde lejos y siendo menos box to box de lo que acostumbra. Fue más Pajarito que Halcón. Pero tiene excusa. Nota: 3.
Modric (63′): noche muy discreta. En un equipo sin control de balón, debe asumir la responsabilidad, porque si Ancelotti lo puso por delante de Camavinga fue, precisamente, para reforzar esto. El desorden del equipo no le ayuda, pero tampoco fue su noche. Nota: 4.
Bellingham (74′): más actitud que acierto. Asumía las labores de estirar al equipo, controlando corriendo con el balón y encarando, pero todas sus internadas eran estériles, acabando en la banda y retrasando para algún centrocampista. Todavía no ha marcado esta temporada pero, más allá de este dato, lo peor son las sensaciones. Se le ve muy lejos de ser el del año pasado. Y la excusa de que hace otras labores ya no vale. Nota: 4.
Mbappé: no le entra. Lo prueba, lo prueba y lo prueba, pero nada. Tuvo hasta dos manos a manos con Maignan y en ambos se encontró con el guardameta (donde había un duelo morboso, pues en el anterior parón el portero le recriminó su actitud en el vestuario, delante del resto de compañeros). Mbappé sabe que no está cumpliendo las expectativas y, una noche más, no lo hizo. Más corazón que cabeza. Más velocidad que colmillo. Ancelotti no le pide presionar, sólo goles. Pero es que no le está dando goles. Aroma de mayday. Nota: 3
Vinicius: el cenital le apuntaba, una vez que volvía a jugar al fútbol tras el varapalo de no ganar el Balón de Oro. Y fue de más a menos. Estirando al equipo y encarando con ahínco en la primera parte. Con esa actitud, llegó a forzar el penalti que terminó en gol del empate (panenka y grito de rabia). El Bernabéu está con él y lo escenificó tanto silbando el himno de la Champions (como protesta a la UEFA), como rompiendo en aplausos al sonar su nombre en el videomarcador. Pero futbolísticamente hablando, en la segunda parte bajó considerablemente. Una imagen muy lejos de lo que tiene acostumbrado. Nota: 4.
Suplente
Camavinga (46′): Modric le ganó el pulso del centro del campo, pero en el descanso Ancelotti tuvo que tirar de él ante la mala imagen que estaba ofreciendo Tchouameni. Entró para ser pivote y ofreció tanto más energía, como actitud que su compatriota, pero el equipo era muy estático y, ante eso, es difícil generar. Nota: 3.
Brahim (46′): le puso ahínco, ganas, coraje; pero no fue la noche en la que la varita más chiribitas echó. Discreto. Nota: 4.
Ceballos (63′): entró en la segunda parte para aportar más oxígeno, en el lugar de Modric. Poca producción. Nota: 3.
Fran García (74′): Ancelotti lo sacó para estirar al equipo por el carril zurdo. Apenas tuvo intervenciones y en las que actuó, poco acierto. Nota: 4.
Rodrygo (74′): errático, al nivel del resto de sus compañeros. Asociándose mal con sus compañeros y decidiendo mal a la hora de disparar. Nota: 4.