1x1 del Atlético: que las molestias de Barrios se queden en eso
El canterano marca el gol rojiblanco, pero se retira en el descanso. Witsel se sitúa de pivote y también sale tocado. Un gol que hace mucho daño en el añadido.
Oblak: La Lazio buscó hacer daño con centros laterales y córners, algo que hizo dudar en alguna acción al esloveno, pero pudo solventarlo con los puños. Primera intervención sencilla para repeler una falta de Luis Alberto. Resolvió su grave error en la salida de pelota deteniendo el posterior disparo de Immobile. Muy buena mano en el tiempo añadido para mantener la ventaja, iba a ser el héroe, pero no pudo hacer nada en el remate del portero rival en la última jugada del partido.
Nahuel Molina: Insustituible en este equipo, regresó al once tras la suplencia prácticamente obligada en Mestalla por el regreso tardío con la selección. Añade siempre vértigo y velocidad a la banda derecha, una posibilidad más en ataque. No tiene tanta sintonía con Llorente como con De Paul. Pérdida peligrosa que no fue a más por el mal control de Kamada. Buen trabajo en defensa, aunque pudo evitar el córner que a la postre fue el gol del empate de la Lazio.
Savic: La defensa necesitaba subir la intensidad y el nivel tras el partido de Mestalla. El montenegrino estuvo serio en los balones aéreos para Immobile buscando su espalda. Pareja rocosa con Giménez en la segunda mitad, se conocen y complementan. Nadie marcó a Provedel.
Witsel: El centro de la zaga despertó de la pesadilla de Valencia, aunque tuvo que vivir muy cerca de su área. Las molestias de Barrios le llevaron a iniciar la segunda mitad como pivote. Simeone ya le considera a todas luces central, pero las bajas siguen ahogando al equipo en el medio. Pudo marcar en una buena llegada y el disparo que obligó a actuar a Provedel. Ya no tiene la velocidad de antaño, es imprescindible que le busquen al pie. Conoce el oficio, es indudable que experiencia no le falta. Estaba haciendo un buen trabajo, pero se marchó tocado y si sufre una lesión será un drama más en el medio colchonero.
Hermoso: Comenzó en la línea de tres centrales, pero saltando mucho a banda para ayudar a Lino. La Lazio situaba a Immobile como única punta de lanza, por lo que el Cholo trasladó al madrileño al lateral durante buena parte de la segunda mitad, permitiendo liberarse en ataque a Lino y posteriormente a Riquelme.
Lino: Primera titularidad en el Atlético de Madrid. Una pequeña lesión le impidió participar en Mestalla, pero se le vio fino y asumiendo responsabilidades ofensivas en la izquierda desde el principio. Capacidad de encarar y de marcharse en el uno contra uno. En estos momentos parece la alternativa más hecha para intentar llevar a cabo el insustituible papel de Carrasco. En la segunda mitad adelantó metros y dejó a Hermoso como lateral. Mucho peligro con sus subidas, tuvo el gol en sus botas, pero se estrelló con Provedel. Sustituido por Riquelme en los diez minutos finales tras hacer un buen trabajo.
Barrios: La mejor noticia en este inicio de curso. Sin Koke y De Paul ha dado el paso adelante que necesita el medio y el canterano, a sus 20 años, es la piedra angular de la sala de máquinas en estos momentos. Probó el disparo lejano y, con rebote de por medio, hizo el primer gol del Atlético en esta Champions. El jugador más joven con la rojiblanca en marcar en la máxima competición continental. Se marchó sustituido en el descanso con molestias, el drama del medio no cesa. Su presencia en el derbi se complica, aunque no está descartado. Sería otro varapalo durísimo en la sala de máquinas colchonera.
Llorente: La ausencia de Koke, De Paul y Lemar exige a Llorente y Saúl un paso adelante en la construcción del juego y no es la principal virtud de ninguno de los dos, más cómodos asomándose a las inmediaciones del área rival por sorpresa. Le está costando encontrar los espacios para correr y ser vertical. La vez que pudo hacerlo generó peligro, pero Griezmann no acertó en el remate. Acabó agotado tras un gran desgaste físico.
Saúl: De vuelta al once en el lugar de Lemar, que se perderá lo que resta de curso. En un medio bajo mínimos, le toca volver a ser importantísimo al igual que en el final del curso pasado. Trata de ayudar a Barrios en el inicio de juego y a Lino con el trabajo por banda izquierda, pero las lesiones se han llevado a los principales constructores de juego y el ilicitano y Llorente sufren más en esa labor. Buen trabajo físico para cubrir espacios, se fue haciendo grande para ir tapando agujeros. Devolvió a banda la última pelota y fue gol de la Lazio, quizás pudo despejar más orientado.
Griezmann: Su nivel desde el Mundial le convirtió en el mejor jugador de la pasada Liga. Pero en este inicio de curso le está costando reencontrarlo con balón y el equipo se resiente una barbaridad, ya que tiene una enorme dependencia de la lucidez del francés. En la segunda mitad fue capaz de ir encontrando los espacios entre líneas para poder calmar e imponer el ritmo del partido que más beneficiaba al Atlético. Su trabajo es indiscutible. La estrella mundial con mayor despliegue físico en favor del equipo. Y el delantero que mejor defiende en campo propio, pero el equipo le necesita también arriba y la que tuvo le botó mal y se marchó desviado.
Morata: Fue un partido de mucho desgaste y pocas ocasiones. Se estrelló con el palo tras un rebote en una acción parecida al gol de Barrios. Mucho trabajo por el equipo, fue muy importante en el juego aéreo en campo propio, última barrera ante Oblak en varias ocasiones. Pero encuentro poco vistoso para el punta, que ha completado los partidos en Mestalla y Roma.
Giménez da otro aire a la defensa
Giménez: Cambio obligado en el descanso por las molestias de Barrios. Se situó atrás, dejando en muchos minutos a Hermoso de lateral, formando defensa de cuatro como pareja de Savic, y adelantando a Witsel. No sorprendería verle en el derbi de titular, porque es clave para dar seguridad, energías y fuerza a la zaga. Una marcha más en la retaguardia.
Correa: Los problemas físicos de Witsel dejaron a Simeone sin variantes en el medio del primer equipo en el banquillo. El argentino entró en ataque y retrasó metros a Griezmann y Llorente. No pareció tener una posición definida y agitó demasiado, quizás a sus propios compañeros. Le hicieron una falta clara con la que prácticamente acababa el partido, no se señaló, vio la amarilla y la Lazio acabó empatando.
Riquelme: Su entrada para dar aire fresco al equipo se vio recompensada pronto, con varias conducciones que obligaron a replegar a la zaga de la Lazio y que sirvieron al equipo para estirarse, sacar un córner y una falta que fueron oxígeno. Mucho talento individual para encarar y marcharse. Un cambio que dio rédito.