La metamorfosis de Esquivel
El portero, que superó una taquicardia y lesión grave de rodilla, se adueña de la portería del Madrileño. Tercer portero de Simeone y en la Sub-21. Tres goles encajados en seis partidos.


El Atlético Madrileño tiene su ángel de la guardia. Su Salvador cuando los partidos se complican. Un Esquivel bajo los palos que se ha convertido en el muro del líder. Tres goles encajados en sus seis partidos hablan a las claras del nivel del guardameta. Planta, juego aéreo y reflejos para cubrir una portería del filial que quedaba huérfana tras años de Iturbe defendiendo al equipo que siempre será de su corazón.
Pero Salvi Esquivel se ha hecho fuerte. Y demuestra que se ha repuesto a los escollos que se fueron interponiendo en su sueño por optar a la portería del Atlético. A sus 20 años, el andaluz llegó al club rojiblanco con 16 procedente del Málaga. En una Academia donde se trabaja muy bien los reflejos y cualidades de sus guardametas (Álvaro Moreno, Dani Rubio o la constante presencia del portero atlético en el once ideal de los torneos de categorías inferiores), Esquivel fue escalando hasta hacerse con las redes en Europa. Titular en el juvenil con Torres, el portero sufrió un episodio de taquicardia el 7 de noviembre del año 2023 en la Youth League contra el Celtic. Se sintió indispuesto cuando el encuentro se encaminaba a su fin y tuvo que ser atendido y trasladado directamente al hospital para someterse a pruebas.
Todo quedó en un gran susto y pudo volver a competir esa misma temporada para levantar la Liga. Pero a Esquivel le llegó un nuevo contratiempo. Sufrió una rotura de ligamento cruzado antes de la Copa de Campeones, que también levantaría el equipo de Torres con Luismi bajo palos. Y la palabra resiliencia se grabó a conciencia en Esquivel. Recuperarse, debutar con el filial, por entonces Atlético B, en el Metropolitano con portería a cero y esperar su momento.
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Que ha llegado esta temporada. El Atlético incorporó a Mario de Luis para competir por el puesto. Y el ex del Real Madrid viene ofreciendo buenas sensaciones, ha disputado tres partidos y aunque ha encajado seis goles, fue el mejor del equipo en la derrota por 3-0 contra el Hércules y poco pudo hacer para evitar alguno de los tres tantos del Cartagena. Dos porteros que se mejoran en la competencia interna. Pero la titularidad en estos momentos se la ha ganado un Esquivel agigantado. Su 1,93 le convierte en un portento por arriba. Ejerce como tercer guardameta de Simeone. Preparado por si Oblak, que lo ha jugado todo, y Musso tienen algún contratiempo, como ha ocurrido esta semana donde una gripe le ha mantenido fuera de los entrenamientos en varias sesiones, incluida la de este viernes. Y ha su vez se ha ganado una plaza en la Sub-21, ausentándose de rojiblanco en los parones internacionales. Es su momento. El muro del líder. Tan difícil de batir como de superar por lo alto. Torres le conoce bien. Y le ha dado la portería. Sabe que su Salvador está en plena forma.
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