El Oviedo, aclamado por su gente antes del partido decisivo
Miles de aficionados arropan a los suyos en la rampa de acceso al Carlos Tartiere antes del choque ante el Ibiza en el que busca el play-off
El Oviedo no depende de sí mismo, tiene que ganar su duelo ante el Ibiza y esperar. Necesita que Girona o Las Palmas pierdan en su duelo en Burgos y Gijón, respectivamente. La combinación de los dos resultados le daría al oviedismo la fiesta por la que lleva esperando tanto tiempo: el anhelado play-off de ascenso. La afición cree en los suyos como ha mostrado en las horas previas al envite: miles de aficionados han acudido a las inmediaciones del Carlos Tartiere para alentar a los suyos de cara al encuentro.
La convocatoria realizada esta semana por la Asociación de Peñas Azules del Real Oviedo (APARO) ha surtido el efecto deseado y el equipo se ha encontrado en su camino al estadio con un grupo importante de seguidores que les ha mostrado sus ánimos para el choque.
La convocatoria estaba fijada para las 18.00 horas, dos antes del encuentro, para coincidir con la llegada del autobús de los futbolistas, que se habían concentrado en un céntrico hotel, al estadio. Gritos de ánimo, consignas y cánticos empujaron el vehículo del equipo carbayón hasta el campo. El último gesto de apoyo de una afición que se ha caracterizado todo el año por apoyar a los de Ziganda.
La ilusión se ha palpado en Oviedo durante toda la semana, a pesar del varapalo de la última jornada, con dolorosa derrota en Las Palmas, con la que los del Cuco se caían de la zona de play-off para ya no depender de ellos mismos. El club lanzó una iniciativa para tratar de que el estadio presente la mejor imagen posible en la despedida de la Liga regular y la afición respondió al momento, con una venta de entradas a buen ritmo desde el primer día.
Se espera que el Tartiere se acerque a los 20.000 espectadores en el duelo ante el Ibiza, presentando una de las mejores entradas del año. Será el momento de estar pendiente de más de un campo, consecuencia directa de no depender de uno mismo, pero la afición azul la afronta con la ilusión de que se den los resultados deseados y el equipo logre colarse entre los seis primeros de la clasificación.
La racha en las últimas jornadas de la competición, que situaban a los de Ziganda como el equipo más en forma de Segunda, ha sufrido un parón en las tres semanas precedentes. Los azules solo han sido capaces de sumar 2 de los 9 puntos que estaban en juego, claves para dejar su puesto en la zona de play-off. Pero los buenos resultados anteriores le conceden una última oportunidad a la que se agarra la afición carbayona.
Versión ofensiva
El equipo quiere permanecer ajeno a lo que suceda en otros estadios y se centra en cumplir con su parte del trabajo: ganar al Ibiza. Solo con un triunfo mantendría vivas sus opciones a la promoción de ascenso. Para intentarlo, Ziganda se refugiará, previsiblemente, de nuevo en los dos delanteros en su sistema: el 4-4-2 que ha sido habitual a lo largo de toda la temporada en los duelos en el Tartiere. Una apuesta ofensiva ante el alegre Ibiza que, como advirtió Ziganda en la previa, “siempre mira hacia adelante”.