David Mella, un ‘bendito’ problema para Julen Guerrero
El extremo del Dépor fue el mejor de la Rojita ante Serbia, a la que marcó el día que cumplía 17 años. La competencia por un hueco en el once es altísima.
A Julen Guerrero le ha estallado un problema, uno que seguro agradecerá. La competencia por hacerse un hueco en el once en el Europeo Sub-17 es altísima y jugadores que en los dos primeros encuentros ante Turquía y Bélgica habían contado con menos minutos, como David Mella, extremo del Deportivo, Álvaro Ginés, del Real Madrid, y el portero Ferran Quetglàs, del Mallorca, demostraron ante Serbia que están en plena forma para ser parte del equipo cuando el seleccionador de la Sub-17 lo crea necesario. También Pol Fortuny, centrocampista del Madrid, y Simo, central del Espanyol, que a priori no llegaron a Israel con el cartel de titularísimos, han demostrado ser de los jugadores más enchufados de un equipo que sueña con llegar a lo más alto del campeonato.
David Mella (Santiago de Compostela, 2005) fue el mejor jugador de la Rojita en el tercer partido de la fase de grupos. El extremo gallego anotó el gol de España con un derechazo, su pierna mala, desde fuera del área y estuvo realmente activo por la banda izquierda, por la que llegó casi todo el peligro de la Selección. Una actuación colosal para celebrar de la mejor manera posible el día en el que cumplía 17 años. Su problema es que en su posición juega Dani Rodríguez, del Barça, otra perla que ha destacado enormemente en la fase de grupos, en la que ha marcado un tanto y ha repartido dos asistencias. Una fórmula para encajar a ambos es cambiar a Dani de banda, algo que ocurrió en los últimos minutos del encuentro ante Serbia. Veremos qué ocurre ante Portugal en cuartos de final.
Un problema parecido tiene Álvaro Ginés, que juega en la posición de un Iker Bravo, delantero del Leverkusen, que está de dulce (dos tantos en los dos primeros encuentros). También Simo empezó el Europeo como tercer central, por detrás de Boñar, capitán del equipo, y Yarek, del Valencia, pero aprovechó sus minutos ante Bélgica y Serbia y es difícil imaginarse ahora a la zaga española sin él. Sea como fuere, Julen debe de estar contento. Sabe que ninguno de ‘sus problemas’ le va a fallar.