Un tercio de los goles recibidos llegaron a balón parado
El Sevilla es el equipo menos goleado de la Liga con 30 goles, pero diez de ellos se produjeron en jugadas de estrategia, faltas o penaltis
El Sevilla llega a la última jornada del campeonato como el equipo menos goleado de la Liga. Con 30 goles recibidos, los de Lopetegui han demostrado un poderío defensivo que, sin embargo, ha tenido una debilidad que no se ha sabido corregir a lo largo de todo el curso: el balón parado.
Y es que de los 30 goles encajados, un tercio de ellos llegaron a balón parado. El Sevilla, un equipo que no se caracteriza precisamente por la falta de centímetros ni de poderío aéreo en su plantilla, ha visto como el Atlético, por partida doble, el Barcelona, el Granada, el Alavés y el Valencia han perforado su portería en acciones de estrategia. Además, Betis y Cádiz marcaron a través de sendas faltas, mientras que el Alavés y el Levante lo hicieron de penalti.
Un total de 10 goles de 30 no llegaron a las redes sevillistas a través de jugadas. Y el problema se extendió a otras competiciones, siendo la mayor evidencia el córner directo que Fekir marcó a Alfonso Pastor en la ya famosa eliminatoria de Copa del Rey en el Villamarín. Además, la sensación de inseguridad en las acciones de estrategia en contra ha sido una constante a lo largo de la temporada, ya fuera por errores en la defensa en zona o por la falta de hombres importantes a la hora de defender el balón parado, como ha sido el caso de En Nesyri.
Si Bono no juega el domingo ante el Athletic, asegurará el Zamora. Y si el Sevilla no encaja dos tantos más que el Real Madrid, acabará como el equipo menos goleado. Dos circunstancias que contrastan con los problemas que ha habido para frenar el balón parado en contra.