Luis Suárez, un adiós que duele a todo el Atlético: Simeone, Koke...
El uruguayo se despidió entre lágrimas junto a su familia del Wanda Metropolitano. El ariete se ha ganado a la afición, a sus compañeros y al club y fue un adiós muy emotivo.
A las 18:11 advirtió el Atlético, casi una hora y media antes del choque contra el Sevilla: "Al término de partido, el Wanda Metropolitano rendirá homenaje a Luis Suárez y Héctor Herrera, que se despiden hoy de la familia atlética". El adiós del mexicano se sabía y el del uruguayo se intuía, pero con ese tuit se confirmaba. Y el adiós del Lucho pasó a ser lo más importante de la tarde. Sus compañeros le buscaban para que marcara, la grada le ovacionaba con insistencia y él sabía que la cuenta atrás llegaba al final. Con su cambio, en el 65', las primeras lágrimas. Y en el homenaje final ya fue incontenible. Su llanto, el de varios compañeros, incluso el de Simeone.
Luis Suárez cierra una etapa de dos temporadas, 82 partidos (más el de San Sebastián), 34 goles y, sobre todo, una Liga en la que fue decisivo. La lástima fue que el Atlético, con el uruguayo como ariete, no pudo disfrutar de esa Liga con la afición, así que todos los reconocimientos del Metropolitano han tenido que esperar a esta temporada. "Gracias, Lucho, por hacernos campeones", fue la pancarta que desplegó el Fondo este domingo. El "uruguayo, uruguayo" ha retumbado desde el primer día.
La Liga de la Zona Suárez
El Pistolero llegó al Atlético en 2020 con la intención de demostrar que seguía "vigente". La conquista de la Liga fue la revancha perfecta para él y para el club, que confió en él y vio una oportunidad que no podía dejar escapar. En cuanto se supo que iba a salir del Barça, Gil Marín y Simeone se pusieron manos a la obra. Lo que vino después es ya historia del Atleti, con Suárez llorando sobre el césped de Zorrilla como una de las imágenes más icónicas de la pasada temporada. El broche a la llamada Zona Suárez, el momento en el que un futbolista de su talla y su jerarquía tenía que dar la talla.
Este curso no ha sido igual. "Tuve una charla con Luis a mediados de noviembre, dura, larga y sincera", explicó Simeone en la previa del Atlético-Sevilla. Su peso en el equipo ha sido mejor desde la vuelta del parón navideño, pero "con la gente que se compromete de la manera en la que se comportó Luis, siempre chapeau", reconoce el Cholo. Como desvelaron las imágenes de El Día Después, de Movistar, ni el técnico pudo contener la emoción en la despedida de Suárez. Al capitán Koke también se le vio tocado. Agradecimiento total y respeto hacia un futbolista que, además de gol, llegó con humildad, pero también aportó liderazgo y carácter ganador. Y esta temporada, cuando menos le tocó jugar, su actitud fue ejemplar para asumir el nuevo rol. Capitán sin brazalete y Leyenda sin placa, pero se va con el reconocimiento y el cariño de toda la afición colchonera.