Sangría contra los recién ascendidos
De entre los seis primeros clasificados, solo el Real Oviedo promedia menos puntos ante estos equipos que el Real Valladolid.
La amarga derrota del Real Valladolid ante la Real Sociedad B dejó un sabor amargo que rasgó la garganta de cualquier blanquivioleta y resultó añejo, conocido, pues no se trataba ni del primer tropiezo seguramente inmerecido, ni del primero provocado por concesiones innecesarias, ni tampoco en un escenario o ante un rival que no entraban en los planes, siendo lo primero Zorrilla y el segundo un equipo a 35 puntos en la tabla.
Fútbol es fútbol, que diría Vujadin Boskov, aunque la afirmación, tan vacía como plena, no servirá a una afición que abandonó el estadio, cuando menos, cabizbaja, al ver cómo el ascenso directo se alejaba frente a un recién ascendido, el cuarto contra el que tropiezan los blanquivioletas. Y es que, después de hacerlo ante Burgos, Amorebieta e Ibiza en la primera vuelta, los de Pacheta repitieron ante el último de los cuatro, a quien ganaron 0-2 en la ida.
Estos pinchazos convierten al Real Valladolid en el segundo peor equipo de los seis primeros clasificados a la hora de enfrentarse a estos rivales, con únicamente diez unidades obtenidas, una más que el Real Oviedo, y muy alejado de Eibar y Almería, que han obtenido 19 y 18, respectivamente. La cifra solo la maquillaría ganar al Ibiza en Can Misses en unas semanas, un objetivo, eso sí, alejado del prioritario de vencer en Ipurua.
Ampliando la comparativa a Ponferradina y Las Palmas, los bercianos han puntuado menos, pero también en menos partidos (nueve unidades en seis encuentros), mientras que los amarillos han obtenido una mayor cosecha, pero tienen una peor media, de 1'38, frente al 1'43 del Pucela. Esta pobre circunstancia, en la generalidad, además se agrava con que a otros como el Almería, el Girona o el propio Oviedo les queda uno de estos equipos.
Si bien sobra decir que los cuatro son tan dignos como los otros 18 militantes de la categoría, sirve la anterior tabla como una de las medidas diferenciales que se pueden aplicar a la hora de explicar las razones que llevan al Real Valladolid a estar en una posición menos ventajosa que Eibar y Almería, quienes han logrado una cosecha más importante y que, de haber podido igualar los pucelanos, igualaría, a su vez, una pelea desigual a falta de cuatro jornadas.