El Girona, un especialista en el ‘sprint’ final

Son cinco victorias consecutivas las que acumula el Girona, con un ojo puesto ya en el ascenso directo, antes de medirse este fin de semana al Zaragoza. Un escenario que se les da especialmente bien (no pierden desde 2014) y en el que tratarán de sumar los tres puntos por sexta jornada consecutiva. Es una empresa complicada, nadie lo duda, pero el Girona está en un gran momento. Además, el tramo final de campeonato, se les da especialmente bien: a excepción de las dos temporadas en Primera, siempre han rendido por encima de la media en los últimos diez partidos de Liga.

Sin ir más lejos, el curso pasado, los resultados fueron fantásticos. Con Francisco al mando y en busca del ansiado ascenso el Girona solo perdió uno de los últimos diez encuentros (fuera contra el Rayo) empató otro (el último ante el Cartagena que era irrelevante). Ganó ocho. Unos números que, este curso, podrían auparle hasta el ascenso directo. En la 19-20 el balance fue peor (tres derrotas) pero les sirvió igualmente para meterse en el playoff de ascenso.

Los dos cursos anteriores, en Primera, fueron peores. En el primer año el Girona salvó la categoría con un balance normal. En la segunda, con una victoria y diez derrotas en los últimos once partidos, la perdió.

Las temporadas anteriores, antes del ascenso, fueron también muy buenas en el tramo final. La peor fue la 16-17, curiosamente, la del ascenso. Entre que el equipo entonces dirigido por Machín tenía mucho margen y cierto nerviosismo en las últimas jornadas, los gerundenses perdieron cinco de los últimos diez partidos. Dio igual, valió un ascenso. En la 15-16 y en la 14-15 solo perdieron un partido de los últimos diez. Unos números fantásticos.