Omnipresente Ferran
En catorce partidos, ha rematado 45 veces; ha marcado seis goles, ha dado cinco asistencias y diez pases clave. Sólo le falta punteria: falló siete grandes ocasiones.
Ferran Torres empieza a darle estos días la razón a la apuesta que el pasado mes de noviembre hicieron Mateu Alemany y Xavi, cuando decidieron ir con todo a por el fichaje del valenciano. “Hemos hecho una excepción por Ferran”, admitió el director de fútbol del Barça, que negoció su fichaje con el Manchester City durante un mes largo para cerrarlo en Navidad. El 28 de diciembre, Ferran Torres se convirtió en jugador del Barça por 55 millones de euros más diez en variables. Puede decirse que su rendimiento ha sido prácticamente inmediato.
Después de su debut en en el Clásico de la Supercopa de Arabia, donde todavía estaba algo perdido y falto de ritmo, marcó su primer gol en San Mamés y, desde entonces, ha generado algo para el Barça casi cada choque. En 14 partidos, Ferran ha marcado seis goles y ha dado cinco asistencias. Pero no solo eso. También se ha fabricado diez ocasiones de gol y, además, ha dado diez pases clave (los que permiten el disparo de un compañero), una estadística muy valorada entre los entrenadores. A Ferran sólo le falta mejorar la asignatura de la puntería. Necesita siete remates para marcar un gol y ha fallado siete grandes ocasiones. Según Opta, un baremo en el que entran manos a manos como el que tuvo el otro día al inicio de la segunda parte en el Bernabéu; u ocasiones dentro del área como la que malogró el día del Nápoles. Además, ha intentado 45 remates, a más de tres por partido, fuera a puerta, fuera o rechazados.
Pero, más allá de las cifras, lo que más está gustando en Ferran es su facilidad para generar juego. Xavi le insiste en que venga a recibir, descargue y que vaya al espacio. Ahí, su zancada y su recorrido son diabólicos. El valenciano dejó en evidencia a Carvajal el pasado domingo. Se divierte cuando hay espacios, pero también sabe jugar ante defensas cerradas. Aunque no estuvo completamente fino de cara al gol, fue capaz de generar muchas opciones de gol contra el Nápoles o en Elche, ante defensas cerradas. Indiscutible desde que llegó, y adaptadísmo a la ciudad desde pronto, ha ido adquiriendo su mejor punto físico y está alcanzando su cien por cien. En el vestuario, además, se ha encontrado una piña que tiene su continuación en la Selección. Ese conexión con Pedri, Araújo, Gavi o Eric Garcia apunta a ser la nueva columna vertebral del Barça.