REAL MADRID - BARCELONA | BERND SCHUSTER
"Los Clásicos me ponían y más cuando vivía en Barcelona"
Hay pocas figuras más conocedoras de lo que significa un Clásico. Por algo Bernd Schuster jugó 13 duelos con el Barcelona y seis con el Madrid.
Es Bernd Schuster (Augsburgo, Alemania, 62 años) y cuando un Real Madrid-Barcelona se acerca por la ventana es una bendita referencia. Aunque también podría serlo en vísperas de un derbi madrileño o de un Atlético-Barça. Por algo es uno de los dos únicos futbolistas que ha jugado en los tres equipos. El otro es Miquel Soler. Por su rubia cabeza y sus arqueadas piernas pasaron una década de Clásicos como jugador. Desde su estreno de azulgrana en 1980 con 21 años hasta su despedida de blanco en 1990 ya con los 30 cumplidos. Ocho temporadas en el Camp Nou y dos en el Bernabéu: 13 partidos como culé (nueve victorias, tres derrotas y un empate) y seis como merengue (dos ganados, uno empatado y tres perdidos).
Como entrenador, profesión que echa de menos un día sí y otro también, solo conoció el banquillo madridista y ganó los dos Clásicos que le dio tiempo a disputar, ambos en la temporada 2007-08. Ahora, desde la barrera, habla de todo lo que se le plantea, con esa firmeza de convicción que siempre le ha caracterizado.
De cero a cien, ¿cuánto echa de menos el fútbol?
Cien. Echo en falta todo. Veo todo. Las Ligas, la Champions, la Europa League y claro que me gustaría estar ahí. Es mi vida. Todavía me veo lo suficientemente preparado para trabajar con un equipo. Con mi experiencia te ves con capacidad para gestionar y superar cualquier situación y eso tal y como está el fútbol es una ventaja importante.
¿Lleva muy mal lo de solo ver el fútbol por televisión?
Me cojo algún 'cabreo'. Sí, pero cuando llega a ese momento de desesperación lo que hago es ver solo los partidos que me pueden aportar cosas nuevas como entrenador. He llegado hasta a tomar nota cuando he visto cosas que me gustaban. Ahora ya menos. Tampoco hay grandes novedades tácticas. Al fútbol no hay que moverlo mucho y volverlo loco.
¿Está a punto de bajar los brazos y decir se acabó lo de entrenar?
-No soy de bajar los brazos. Claro que me gustaría tener un equipo, pero también tengo bastante frialdad para pensar que puede ser el final de mi carrera. Pasa el tiempo, llega mucha gente joven. Cuando yo era joven les pasó a los mayores. A todos les pasa. Tengo la mente preparada para no pasarlo mal por estar en casa. Ni hablar. Me entretengo como puedo con mi familia, mis amigos, y esperando. La esperanza la tengo plena, pero hay una puerta que me dice que se puede cerrar.
Y en esa calma chicha que vive, cuando se le planta delante un Real Madrid-Barça, a usted, que ha jugado en los dos equipos, qué se le pasa por el cuerpo y la cabeza.
Me vuelven los que me tocaron vivir como entrenador y jugador. Recuerdo lo bonito que es. Siempre me gustaron las semanas de Clásico. Me ponía. La gente te hablaba. El carnicero, el taxista, por la calle… Me ponía las pilas. Los he vivido de todos los colores. Para ganar una Liga o una Copa del Rey y para salvar una temporada… Sabes que el mundo entero ve esos partidos. Era una gran responsabilidad, pero siempre me gustaron… Luego estuve en el Atlético, pero creo que era un poco menos. El Barça-Madrid es el partido con más rivalidad que se puede dar en el mundo del fútbol y más cuando vivía en Barcelona.
¿Se vive más que en Madrid?
Sí. Es algo muy grande. Hubo épocas que ganándole al Madrid salvábamos las temporadas. Cuando no ganábamos el campeonato, ganarles a ellos, sobre todo en el Bernabéu, era importante para nuestros aficionados. Les hacías felices por un día. No sería correcto decir que en Madrid no se toma tan en serio este partido, ¡claro que el aficionado del Madrid quiere ganar al Barça como sea! Pero se lleva de otra manera con más calma. En Barcelona era exagerado toda la semana.
También puede ser porque el barcelonista sea más antimadridista que el madridista antibarcelonista.
Puede ser, por eso aquí no se llevaba al extremo que se llevaba allí.
A pesar de llegar a 15 puntos, ¿no le parece que este partido parece más importante para el Barça y para Xavi que para el Madrid y Ancelotti?
No sé, no diría que es tanto así. El Madrid querrá ganar para llegar ya a la cima de la Liga y el Barça para salvar un poco la temporada ganando en el Bernabéu, además de ir asegurándose su plaza en la Champions del año que viene.
-Entrenó al Real Madrid y ganó una Liga. ¿Nunca tuvo la opción de sentarse en el banquillo local del Camp Nou?
-(Se lo piensa…) No sé, no sé… Creo que no, que no se ha barajado nunca. Al menos a mí nunca me llegó una oferta concreta.
-Me han dicho que hace unos meses, cuando Koeman estaba al borde del precipicio, su amigo Laporta pensó en usted…
-(Nuevo silencio. Sonrisa) Bueno… puede ser que estuviera ahí en la lista. Puede ser, puede ser. Alguien me comentó algo, pero no estoy seguro si era así o no. Pero puede que en un momento pudiera estar en esa lista, pero no estoy seguro.
-¿Y lo de Xavi cómo lo vio y cómo lo ve?
-Ya hacía tiempo que se decía que Xavi sería antes o después entrenador del Barça. Se veía venir. Conociéndole, cómo ve el fútbol, cómo le gusta… Me lo imaginaba, pero a lo mejor no tan rápido. Lo que ocurre es que en el fútbol nunca sabes cuando te toca. Nunca se sabe el cuándo. A Xavi le ha tocado un momento, difícil, muy, muy complicado. A lo mejor un entrenador veterano se lo hubiera pensado más que él que es tan joven… Cuando eres joven quieres triunfar. No te asusta nada, absolutamente nada. Por eso ha venido, independientemente de que fuera un buen momento. Jan (Laporta) vio la opinión de los aficionados, de la Prensa… Que todos estaban encantados con su llegada. La gran ventaja que tiene es su juventud.
Y si en ese momento difícil, Laporta hubiera descolgado el teléfono y hubiera dicho, Bernardo te necesitamos… ¿hubiera ido?
Sí, nunca hubiera sido un problema. Igual que Xavi lo hace ahora desde la juventud, yo lo haría desde la experiencia que he vivido. A mí tampoco me asusta nada. No me hubiera preocupado para nada.
Nadie mejor que un centrocampista como usted, mediocentro de postín, para analizar las salas de máquinas de los dos equipos: Casemiro-Modric-Kroos contra Busquets-De Jong (Gavi)-Pedri. Usted es el entrenador, puede elegir, ¿con cuál se queda?
El trío del Madrid lo ha ganado todo, ha tenido un éxito tremendo, pero ya no son tan jóvenes y enfrente tienes un veterano, Busquets, y tres chicos. De Jong es un poco más mayor que los otros dos, con hambre, que quieren triunfar, ganar títulos. No es fácil elegir. En estos partidos los entrenadores tiramos mucho por la veteranía porque son partidos que se deciden por detalles y ahí la veteranía tiene mucho que decir. Digamos que para un Madrid-Barça pongo a los tres del Madrid y para toda la temporada me quedo con los del Barça… Más o menos, que se me entienda.
Busquets le ha salido bueno al Barça…
Seguro. Un gran acierto de Pep (Guardiola) que lo vio en el filial y lo puso sin dudar. En mi equipo siempre jugaría. Tiene una ventaja, conoce el estilo de juego del Barça. La llegada de Xavi le va a hacer mucho bien. En los últimos tiempos el estilo no le terminaba de favorecer. Tenía mucho más recorrido, salía a campo abierto y eso no iba con su forma de jugar. Él rinde más en espacios reducidos, con pases cortos. Por eso decíamos que con Luis Enrique en la Selección jugaba mejor. En el Barça se iba de su sitio, la llegada de De Jong le afectó y ahora creo que vuelve a jugar donde tiene que jugar. En la filosofía de juego azulgrana cada uno tiene su espacio y jugando así va a alargar su carrera, seguro.
El mejor mediocentro de la última década…
Kroos y Modric son parecidos, pero muchas veces no los comparamos porque tienen más recorrido, no se quedan tan fijos. Por calidad coloco a los tres en el mismo escalafón… Eso es lo que a veces me falta de Casemiro, que tuviera un poco de Busquets, esa ayuda en la salida del juego. En lugar de hacerla él, la tienen que hacer Modric o Kroos. Él debería ser quien sacara el balón porque juega en la posición idónea para hacerlo, por delante de la defensa. En el aspecto defensivo y táctico, a Casemiro no se le puede decir nada. Es muy bueno también en el balón parado. Marca goles de cabeza, pero lo otro sí que se le puede reprochar y por eso a veces no le he valorado tanto. Su fuerte no es tener el balón, repartir y ayudar a Kroos y Modric para que no tengan que bajar tanto y dejarlos un poco por delante tuyo. En esa posición me gusta más Busquets… o como eran Xavi o Xabi Alonso en su tiempo. Pivotes defensivos, pero que reparten el juego, ayudan a los centrales a la salida. A mí el mediocentro me gusta creativo, no solo de contención.
Como era usted…
Como era yo, más o menos. En nuestra época no nos ataban tanto en esa posición. Nos dejaban salir y apoyar en la jugada ofensiva. Esa es la fuerza de Modric y de Kroos, que son muy buenos en la segunda línea, como interiores, los dos tienen un tiro fantástico de 18-20 metros, tienen un gran pase de gol, pero claro a veces les toca estar demasiado lejos. No llegan a acompañar la jugada final.
Pedri, ¿le parece tan bueno como estamos diciendo o todavía le falta hacerse a fuego lento?
Tiene algo muy bueno, que hace muchas cosas con el balón. Entiende bien el juego. Con Messi, por ejemplo, se entendió perfectamente. Le daba buenos últimos pases. Lo único que me gustaría es que tuviera un poco más de gol en las llegadas, rematara más. Con el tiempo lo puede conseguir, seguro. Un centrocampista ofensivo que llega desde segunda línea tiene que tener gol. Él, además defiende. No está quieto nunca. Se coloca bien.
Esta Liga es del Real Madrid y solo la puede perder el Madrid.
Sí. A Sevilla y Betis nunca los vi como rivales importantes para el título y con la lejanía del Barça y el Atlético, solo se la pueden estropear ellos mismos.
¿Conoce a Ancelotti?
Sí. Me cae muy bien. Me llevo bien con él. Jugamos uno contra el otro, él en el Milan de Sacchi y yo en el Real Madrid. Nos metieron cinco. Como jugador ya era un estratega, por eso no me sorprende lo que ha hecho de entrenador. Tiene cierta frialdad a la hora de ver las cosas. Aunque es italiano, le gusta un buen fútbol y sabe llevar un grupo. Esa es una gran virtud en los grandes entrenadores. Siempre ha estado en equipos importantes con grandes estrellas. Él es un 'tío' natural. Me gusta como es.
¿Se imagina ya un Real Madrid con Mbappé?
Eso parece, ¿no? Es un jugador que puede marcar la próxima década. Tiene la cabeza muy bien amueblada, como se dice. Callado, habla en el campo. Va, juega y se va. No enseña los tatuajes, ni se pone el pelo verde o rojo. En París ha sabido estar en cada momento. Primero le llevan a Neymar, no dice nada. Después a Messi, tampoco dice nada. Mbappé-Benzema-Vinicius pueden formar una delantera de lujo.
¿Y dónde entra ahí Haaland?
No entra… Bueno puede entrar, pero tengo mi teoría sobre Haaland. Creo que debe irse del Dortmund, pero a lo mejor no al Madrid. Tampoco le veo en el Barcelona por su forma de jugar. Le veo en Inglaterra. Ese fútbol está más hecho para él, por lo menos ahora.
¿El mejor equipo del momento?
Me gusta el Bayern. El Liverpool de Klopp otra vez este año. Siempre busca la portería. Al Chelsea da gusto verlo. Nunca fui un convencido de Tuchel, pero reconozco que ha sabido encontrar un equipo y ha crecido mucho. No porque ganara la Champions, sino porque ha demostrado su valor como entrenador haciendo un equipo. Sufrió en el Dortmund y en el PSG.
Se han puesto de moda otra vez los tres centrales, algo históricamente muy alemán.
Sí, pero eso ha existido toda la vida lo que pasa es que se comenzó a decir que jugar con una línea de tres o de cinco era defensivo y nunca lo ha sido. El Madrid de los 107 goles jugaba con tres centrales, pero éramos un equipo de ataque. Todos iban para arriba y yo me quedaba allí con los centrales. Ahora ya no se ve tan defensivo. Depende dónde pongas a los laterales y quiénes sean los laterales.