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BETIS 1 -ATHLETIC 0

Aprobados y suspensos del Betis: Miranda hizo de Álex

Una internada por la banda del lateral acabó con un cabezazo perfecto de Borja Iglesias para dar el triunfo en un duelo en el que Fekir sacó lo mejor y lo peor que tiene

Sevilla
Miranda.
AFP7 vía Europa Press

Rui Silva: Seguro en todos los envíos por alto del Athletic, lo que dio tranquilidad a unos centrales que no estuvieron especialmente inspirados.

Sabaly: Aseado, aportó mucho en ataque al principio pero se fue apagando.

Pezzella: Cargado con una amarilla innecesaria desde muy pronto, hizo lo que pudo.

Bartra: Las pasó canutas con Williams, Muniain y compañía, pero el marcador de goles en contra del Betis acabó con un cero, así que mereció la pena su sufrimiento.

Miranda: Echaba el Betis de menos las internadas por banda de sus laterales y en su regreso al once titular se sacó de la manga una carrera con un pase medido que valió el gol del triunfo. Lo que se echaba en falta desde la lesión de Álex Moreno.

Guido: No está del todo bien, pero se fajó y ayudó.

Paul: Lo hizo todo fácil, lo cual es uno de los mayores piropos que se le pueden echar a alguien que se dedica a algo tan complicado como jugar al fútbol a nivel profesional.

Canales: Su cabeza sigue funcionando a una velocidad que, ahora mismo, su físico no puede sostener. Y pese a todo, completó un gran partido.

Fekir: Hizo lo que le dio la gana. Lo bueno y lo malo. Que es verdad que le dan por todos lados y de todas las formas, pero él también las suelta. Y, sobre todo, un profesional de su caché y experiencia tiene que medir su temperamento por el bien del equipo.

Juanmi: La ansiedad le puede y si para colmo falla una clarísima nada más empezar.

Borja Iglesias: El delantero centro, al que le pagan por meter goles, marcó el gol del triunfo. Eso ya le valdría un sobresaliente, pero además incordió todo lo que pudo y más a la defensa rival.

CAMBIOS

Ruibal: Otra vez de lateral zurdo y, para colmo, con amarilla nada más entrar. Pero no se arrugó.

Carvalho: Tuvo la pelota y bregó en la medular.

Édgar: Cemento para cerrar el partido.