El año de la lona

Joan Laporta cumple un año este lunes de su segundo mandato como presidente del Barça. Doce meses, doce historias que lo han vertebrado.

1. La elección. El 7 de marzo de 2021, Joan Laporta i Estruch (29-6-1963), socio 13.352, fue escogido presidente del Barça por segunda vez en su vida. 30.184 socios, el 54,28% de los 55.611 que votaron, depositaron en él su confianza por delante de los otros dos candidatos. Víctor Font recibió 16.679 votos y Toni Freixa, 4.769. In extremis, y con la garantía del Banc Sabadell, Laporta firmó el aval de 124,6 millones que certificaba su acceso a la presidencia. Por el camino, sin embargo, perdió al que debía ser su vicepresidente económico y el cerebro de las cuentas del club, Jaume Giró. Los primeros meses de Laporta se caracterizaron por el adiós de todas las figuras del 'antiguo régimen' de Bartomeu: Albert Soler, Òscar Grau, Romà Gómez Ponti. Los dos últimos, relacionados con el Barçagate.

2. El abrazo con Messi. El 17 de marzo, Laporta fue investido oficialmente como presidente del Barça. Para el recuerdo quedó su discurso emotivo y su guiño a Leo Messi, a quien se abrazó antes de iniciar una suerte de 'chantaje emocional'. "Haré todo lo que pueda, él ya lo sabe. Y perdona Leo que lo diga aquí pero ya sabes que te tengo mucha estima y el Barça te quiere mucho. Si este campo estuviera lleno, seguro que no te podrías ir", dijo en su intervención. Pocos meses después, aquellas palabras de la toma de posesión se las llevó el viento.

3. El espejismo de la Copa. A mediados de abril, el primer equipo masculino del Barça ganó el primer título de la segunda era Laporta. Fue la Copa del Rey, después de una exhibición ante el Atletic Club. Aunque no había público, porque la final de La Cartuja se celebró a puerta cerrada, el presidente se mostró eufórico. Volvió a abrazarse a Messi en el vestuario y bromeó con Koeman en el césped. En el avión de regreso, se hicieron la foto protocolaria. Daba la sensación de que presidente, técnico y capitán y estrella formaban un buen triángulo..., que terminaría disolviéndose como un azucarillo.

4. Explota el caso Messi. El 5 de agosto se produjo uno de los acontecimientos más gruesos de la historia reciente del Barça. Después de darse por hecho que renovaría su contrato al menos por dos temporadas, el club azulgrana comunicó oficialmente en un escueto comunicado de nueve líneas que Leo Messi dejaba el Barça por "obstáculos económicos y estructurales". Un golpe tremendo que sigue envuelto de misterio. Las versiones sobre las razones de la marcha de Messi se multiplicaron y, posiblemente, nunca se sepa la verdad completa de una historia con numerosos protagonistas: Laporta, Ferran Reverter, Javier Tebas, Leo Messi y su padre Jorge, los principales. Pero de la que sí quedó el poso de una historia de amor rota entre el presidente, que siempre sospechó que Messi tenía arreglado su futuro con el PSG y no esperó lo suficiente al Barça; y la estrella, que se consideró traicionado por cómo Laporta rompió a última hora el pacto por presiones que impidieron una firma que pareció inminente durante semanas y nunca se produjo.

5. Koeman cae en desgracia. A las 0.15 horas del 28 de octubre, curiosamente justo un año después de la dimisión de Josep Maria Bartomeu, Joan Laporta destituyó a Ronald Koeman como entrenador del Barcelona. Acabó así una historia de idas y venidas y desencuentros que probaron, finalmente, que Laporta no creyó nunca en el holandés los siete meses que fue su técnico. Después de ganar la Copa, el Barça no aguantó el tirón en LaLiga y Laporta organizó una serie de extraños encuentros con Koeman en los que mantuvo "conversaciones" de fútbol para indicarle qué pretendía de él como entrenador. Koeman, huérfano sin Messi, a quien había reconducido después del episodio del burofax, se vio sin equipo y empezó a disparar por todos lados; hasta utilizó una rueda de prensa para leer un comunicado en el que resumía sus sensaciones sobre la plantilla: "No esperéis milagros". Después de perder de forma sonrojante contra el Benfica, Joan Laporta lo confirmó en el cargo antes de jugar en el Wanda. Pero el Barça perdió el Clásico y, entre semana, visitó Vallecas. El Barça perdió 1-0 y fue despedido.

6. Xavi llega seis meses tarde. El 6 de noviembre, Xavi Hernández se convirtió en el nuevo entrenador del Barça hasta junio de 2024 después de que Laporta, en público y privado descartara su incorporación en verano aduciendo falta de experiencia. Su contratación tuvo instantes de vodevil. Una delegación del Barça, en la que no estuvo Joan Laporta, pero sí Mateu Alemany y Rafa Yuste, se desplazó a Qatar para negociar con Al Sadd. Pero las conversaciones con los qataríes se alargaron y no quedó claro cuánto costó su libertad. Tampoco quien lo pagó. El caso es que la presentación del técnico de Terrassa, leyenda del club, desató la euforia de los diez mil aficionados que se acercaron al Camp Nou a vitorear a su ídolo. Presidente y técnico se abrazaron, cantaron el himno y dieron por iniciada una nueva época en la que el Barça trata de recuperar grandeza.

7. Un inicio difícil. Xavi heredó un equipo que había entrenado interinamente Sergi Barjuan y en sus inicios sufrió los mismos problemas que sus predecesores. Las lesiones mermaban la capacidad de escoger jugadores y aparecieron como titulares jugadores como Ilias, Jutglà o Abde a la espera de que se recuperaran los lesionados o se fichara. A estas penurias se sumó la nueva lesión de Ansu Fati en Vigo en un partido dirigido por Sergi. Xavi dejó claro desde el principio que tenía clara la partitura, pero que le faltaban intérpretes. En ese contexto, llegó la eliminación de la Champions. El equipo blaugrana fue incapaz de ganar en el Camp Nou al Benfica y no pasó del empate a cero. Laporta, como en su primer año, tenía la Europa League como escenario.

8. Asambleas, Diu Dilligence y Forensic. Los seguidores del Barcelona han incorporado en estos doce meses términos a su vocabulario que no se habían oído jamás relacionados con su club. El más destacado de todo es ‘Forensic’. Se trata del informe que una auditora externa realizada por la Agencia Krull a partir de la Diu Dilligence de la auditora Deloitte en la que se investigaba si la junta de Bartomeu podía haber incurrido en actuaciones fuera de la ley. La conclusión fue que existen indicios de administración desleal, apropiación indebida, alteración contable y simulación contractual. Laporta, para no ahondar en la grieta social del club, en vez de presentar una denuncia al juzgado presentó el informe a la Fiscalía, que será la que decida. Todo elo pasó desués de tres asambleas: una primera para cerrar los números de la junta anterior (paso obligado para realizar un presupuesto) otra para aprobar el presupuesto del curso y reformular números y una tercera (en la segunda no dio tiempo) para aprobar la demanda de un crédito para financiar el Espai Barça, que se acabó aprobando en el primer referéndum telemático de la historia del club.

9. Esperando las grúas y a Spotify. El Espai Barça merece capítulo aparte porque es el proyecto central del futuro del club. Una vez los socios en referéndum dieron el visto bueno a la junta para aproar el crédito de hasta 1.500 millones de euros a Goldman Sachs (que se uno a otro de 595 ya concedido anteriormente para liquidar la deuda a corto plazo) en el Camp Nou se espera que entren las grúas de una vez, un proyecto que ya se votó en 2014 y que lleva estancado desde entonces con la excepción de la construcción del Estadi Johan Cruyff y la demolición del Mini Estadi. Este verano deberían empezar unas obras que llevarán al Barça a jugar al menos una temporada en el Estadi Olímpic de Montjuïc, un hecho que desde el club no se acaba de confirmar, pero que se ve como inevitable. A todo eso, se une la espera al acuerdo, que parecía inminente, con Spotyfi para que se convierta en nuevo patrocinador del club. El acuerdo estaba a punto de anunciarse cuando Reverter, el CEO, anunció su salida del club.

10. Las alegrías son femeninas y jóvenes. Dentro de las alegrías, que las ha habido en este año, destacan con luz propia el equipo de fútbol femenino y los jóvenes valores del equipo masculino. El equipo femenino, liderado por Alexia Putellas, que ha ganado el The Best y el Balón de Oro en una gesta histórica pues es la primera española que lo gana, ha logrado el triplete y anuncia una era de dominio absoluto. En el masculino, Pedri fue nombrado como Golden Boy (mejor jugador de Europa Sub 21) y junto a la eclosión de talentos como Gavi, Araújo o Nico González (más el lesionado Ansu Fati) dan una esperanza de recuperación deportiva al club cimentada en jugadores jóvenes y muchos formados en la cantera.

11. Terremoto en los despachos. A Ferran Reverter se le presentó desde los días de la candidatura de Laporta como el ‘Messi de los despachos’, no obstante, el pasó del ex director general de la multinacional MediaMarkt por el Camp Nou será efímero. A principios de febrero, ocho meses después de asumir el cargo, Reverter anunció que dejaba el cargo. Sigue a la espera de que le encuentren un sustituto, pero Laporta ha decidido no cubrir su vacante, con lo que su salida ya es inminente. El motivo oficial esgrimido por la entidad fue que Reverter se tomaba “un año sabático”, pero lo cierto es que su manera de llevar el club chocaba frontalmente con la de Laporta. No se entendieron.

12. Superliga, avales, CVC y la sombra de Florentino Pérez. Otro de los aspectos que marcan la abrupta salida de Ferran Reverter es el del difícil equilibrio que mantiene Laporta entre el proyecto de Superliga que lidera Florentino Pérez y la oposición a aceptar entrar en el acuerdo que LaLiga ha firmado con CVC a instancias de Javier Tebas, que es el principal opositor a la nueva competición. Reverter era absolutamente contrario a la idea de Tebas y desde su salida, el Barça y LaLiga han acercado posiciones. Oficialmente, el Barça sigue monolíticamente al lado de Florentino Pérez junto a la Juventus, pero las cosas han cambiado. La modificación de la Ley del Deporte ha liberado al club de presentar avales y esta circunstancia ha provocado que José Elías, el principal avalador de la Junta hace un año, abandone el club. Queda Eduard Romeu, vicepresidente económico, pero parece que el segundo año de Laporta será más de Laporta que de la junta.