Maxi llega a tiempo
El delantero del Valencia, tras pasar los meses más complicados desde su llegada a Mestalla, se reactiva para el tramo decisivo.
Gritó con rabia Maxi Gómez su gol ante el Granada. El uruguayo lo necesitaba. Su racha sin marcar ya era casi eterna después de tres meses repletos de dudas sobre su rendimiento y su futuro. Maxi estaba estancado. El charrúa ni siquiera remataba a puerta. La mochila de la presión rebosaba en su espalda.
Pero Maxi despertó ante el Granada, justo el día en el que se cumplían los tres meses exactos sin marcar. Desde el 5 de diciembre, ante el Celta, no veía puerta el ariete ché. El uruguayo acabó con su sequía ante el Granada y lo hizo justo en el momento clave de la temporada.
Maxi necesitaba marcar y reivindicarse ante Bordalás. El sábado, con un gran gol y la acción que provocó el penalti que anotó Soler, cumplió con su deber. Maxi se sube al carro en el tramo decisivo, en la hora de la verdad.
El uruguayo tiene once partidos por delante para maquillar unos números que están lejos de ser buenos. Este curso suma tres goles en Liga. Al margen de su papel en la competición de la regularidad, Maxi quiere opositar durante este tiempo para estar en el once de Bordalás. Para ello, necesita más goles y actuaciones como la del sábado.