ESPAÑA
El ‘fichador’ milagro de la Liga anda suelto, Fran Garagarza
El exdirector deportivo del Eibar suena para varios clubes tras 14 años de éxito en la entidad armera. El vasco repasa en AS su metodología y sus operaciones más exitosas.
Fran Garagarza (Mutriku, 1966) hizo del Eibar un club ejemplar. Hasta que lo abandonó el pasado verano, estuvo 14 años como director deportivo y lo llevó a consolidarse en Primera División. “Con el tiempo nos daremos cuenta de lo conseguido. Fue un modelo exitoso”, reconoce. Sin embargo, el fútbol no se detiene. Incluso para alguien con tanto éxito es necesario mantenerse vivo: “Ahora estoy viendo los toros desde la barrera. En el Eibar tenía el sentimiento de que la casa era mía, que me habían dado las llaves. Cuando estás fuera te das cuenta de que las cosas también pueden ser de otra manera. Estamos en un proceso de paro activo: estar ocupado, hacer reuniones, visitar a clubes, trabajar con entrenadores, CEOS, formarme…”.
Su día a día es tan intenso como cuando estaba en el Eibar: “Estoy aprendiendo una situación nueva. He estado 14 años metido en un barco y ya no lo estoy. Hemos hecho jornadas de trabajo de formación en el Sevilla, el Betis, el Madrid… ahora visitamos a Sporting de Portugal, Eintrach, Leipzig… Sigo con mi equipo de trabajo, somos tres. Estamos viendo mucho fútbol español, también filiales y Youth League”.
En las últimas semanas sonó como objetivo del Levante, que finalmente optó por Felipe Miñambres. “Han sido rumores... Encontrar club es más difícil de lo que parece. Además, quiero que cuando un club me llame esté preparado. Hay mucho nivel en las direcciones deportivas españolas, es una inversión que funciona. Nuestra preferencia de futuro es España, pero estamos abiertos a todo. También el extranjero”.
Garagarza fue el artífice de varios fichajes del Eibar que luego han alcanzado incluso la Champions: “Joan Jordan, Bryan Gil, Cucurella, Rubén Peña, Lejeune, Pedro León, Keko… Fuimos creciendo a través de las operaciones. Nos hicimos expertos en fichar jugadores de Segunda, por ejemplo. Eran jugadores con hambre. El jugador joven también venía con nosotros porque era como hacer la mili. El perfil de cedidos era bueno”.
En su experiencia quedan algunos nombres importantes y otras apuestas, como la de los japoneses, que salieron sorprendentemente bien. “Una operación que teníamos bien posicionada era Marcos Llorente. Al final no pudo ser. También recuerdo a Borja Bastón o a Rubén Peña, que lo fichamos por 100.000 euros y después acabamos vendiéndolo al Villarreal. También Lejeune. Un día nos llamaron y nos ofrecieron a Inui. Tenía un gran carácter. No se equivocaba y siempre quería aprender. Preguntaba qué hacía mal para no jugar, no por qué no jugaba. Lo quisimos renovar, pero se lo llevó el Betis. Los japoneses son nobles”.