Batalla nula entre Depor y Sanse
El Deportivo se deja un empate ante el Sanse y su liderato queda en el aire. Los coruñeses perdonaron las más claras y a Baro le anularon dos goles.
La visita a Matapiñonera era algo más que tres puntos para el Deportivo. Era ponerse frente a frente con un rival en racha que dominaba hasta el último rincón de su particular fortín. Era medir la entereza para mantener el liderato tras un último mes de cuesta abajo con el problema añadido de la portería y el lateral derecho. A este cúmulo de avatares los coruñeses respondieron con cara y cruz. Dominando el partido, sufriendo hasta el infinito a balón parado, y perdonando las ocasiones más claras. Un punto que puede evaporar el liderato ante un Sanse que sigue por la buena senda sumando por quinto partido consecutivo y acumulando cuatro jornadas sin encajar un solo gol. Punto de mérito ante un Deportivo que atraviesa su peor momento de la temporada y que necesita despertar de forma inmediata y continuada si no quiere ver como el tramo final de la temporada se convierte en un calvario de sufrimiento.
El Deportivo tardó poco más de un minuto en comprobar lo que esperaba porque ese fue el tiempo que necesitó el Sanse en marcar a balón parado. En golpear la confianza de la defensa y del debutante Pablo Brea, de la que se repuso para responder a buen nivel toda la mañana. El bofetón quedó en susto porque el tanto de Baro fue anulado. Los coruñeses reaccionaron al aviso dando un paso hacia adelante y Soriano estrelló un cabezazo en el larguero en una posición inmejorable en el minuto 6. Quinto palo en los últimos cinco partidos en otro revés de la diosa Fortuna. Frenético inicio y cartas sobre la mesa: dominio blanquiazul desde la combinación, juego directo y estrategia de los locales. Diferentes armas, similar peligro en ambas áreas. Intercambio de golpes hasta el minuto 35 en el que una gran triangulación deportivista dejó solo a Quiles, que cuando tocaba empujarla falló en el control de forma incomprensible. Segunda muy clara, segundo perdón. Tablas en el marcador al descanso, tablas en casi todo excepto en la absoluta permisividad para coser a faltas a William sin castigo alguno.
El segundo acto comenzó de forma similar, con ambos equipos buscando los tres puntos con iguales ganas, pero sin acierto final. En una portería por un Pablo Brea que iba ganando en seguridad, en la otra porque los remates seguían sin encontrar los tres palos y comprometer a Bañuz. Y el segundo golpe fue otra vez de Baro tras una nueva jugada de estrategia en el 64’, pero otra vez fue anulado por claro fuera de juego. Con la batalla estancada Borja Jiménez buscó un cambio táctico al sacar a un desafortunado Quiles por Calavera. Poco a poco los coruñeses fueron inclinando el campo en busca del gol, de acertar como no lo hizo Villares en un remate al aire y William tras un pase de Soriano. Idas y venidas, pero ya sin consecuencias para un partido con muchas ocasiones, pero sin goles válidos.