Sesenta minutos esperanzadores y una dupla necesaria
El Fuenlabrada firmó ante el Alcorcón su mejor hora de partido en lo que va de temporada 2021-22. La dupla Bouldini-Ontiveros, clave para ello.
El empate ante el Alcorcón supo a gran decepción en la afición fuenlabreña. En una cita clave y con todo 'medianamente' atado, los de Pellicer dejaron escapar tres puntos que hubiesen sido 'oro' en la carrera por la permanencia. Sin embargo, a ese punto de 'casi victoria' se llegó a través de dos caminos ilusionantes: sesenta minutos de juegos sobresaliente a todos los niveles y la dupla Bouldini-Ontiveros. Motivos para la esperanza.
Los azulones fueron ampliamente superiores al Alcorcón en el primer tiempo y en los quince minutos iniciales de la segunda parte. Cimentado en una defensa que, durante ese tiempo, sólo sufrió en algún balón largo y volvió a ser el muro que se vio ante Valladolid y Eibar, los de Pellicer se volcaron sobre el área defendida por Rivero. Agu y Diéguez, quien sustituyó a Konaté, conformaron un centro del campo que hizo bien su trabajo: robar rápido y arriba para asistir balones a la terna de mediapuntas.
Los Ontiveros, Cristóbal y Pedro León fueron los primeros en lanzar la presión arriba de los suyos, en combinar con rapidez para llegar cuánto antes a la portería alfarera y en rozar el gol, lástima de esos centímetros de más o de menos que privaron de anotar algo más de dos goles. Con ellos, Pellicer ha encontrado la forma de ordenar un ataque fuenlabreño que en algún momento de la temporada vivió de las jugadas personales.
Bouldini, el estilete
Sin embargo, sí hay un nombre por encima de todos en el duelo ante el Alcorcón fue el de Bouldini. El marroquí estrenó su cuenta goleadora con la zamarra azulona de la mejor manera posible: una chilena de museo. No fue el único acercamiento del nueve en el duelo, tuvo seis tiros (cinco de ellos a puerta) y de todos los colores creándose él sus propias jugadas o siendo asistido por Ontiveros. Y, aunque dio el susto al golpearse el pie, el nueve disputó los noventa minutos del duelo. Bouldini ya anota los goles que el Fuenlabrada necesita.