Bravo vuelve a lesionarse pero su renovación no debe peligrar
El portero chileno ya ha tenido varias dolencias desde que llegó al Betis. Pellegrini, gran valedor de Claudio, quiere que siga y el club ya tiene preparada su continuidad.
Claudio Bravo se marchó lesionado del encuentro ante Argentina, y las pruebas a las que fue sometido por la Federación de Chile arrojan una "adherenciolisis en el gemelo derecho", con lo que el portero del Betis no podrá jugar este martes ante Bolivia en La Paz ni probablemente en las próximas semanas con el club verdiblanco.
La adherenciolisis es, básicamente, la reproducción de una reciente lesión muscular. La última del guardameta chileno como verdiblanco se la produjo a finales de noviembre y le tuvo un mes y medio aproximadamente fuera de los terrenos de juego. Las pruebas a las que sea sometido en Sevilla determinarán un nuevo tiempo de baja.
No son desde luego las primeras dolencias que el arquero, que cumplirá 39 años en abril, ha sufrido desde que llegó al Betis en verano de 2020, por petición expresa de Manuel Pellegrini. Problemas de rodilla y también musculares le dejaron fuera de 17 encuentros entre Liga y Copa la pasada campaña.
Pero Pellegrini sigue queriendo contar con Bravo por al menos una temporada más, por su capacidad bajo palos y su ascendente sobre el vestuario. El Betis tiene preparada ya una renovación del portero de Viluco hasta junio de 2023 a la que, a pesar de los problemas físicos, no dará marcha atrás por petición expresa del entrenador que le ha dado por fin al equipo una cara competitiva.