Aubameyang y Dembélé: cómo hemos cambiado

En agosto de 2017, el Barcelona se encontró en la tesitura de tener mucho dinero, pero de perder a Neymar. De manera apresurada, el equipo blaugrana se lanzó a por Ousmane Dembélé costara lo que costara. El Borussia de Dortmund no quería dejar ir al extremo francés y ante la insistencia del club catalán trató de llegar a un pacto mediante el cual ofrecían a muy buen precio a Patrick-Emerick Aubameyang. El Barça no aceptó y Dembélé salió carísimo. Cinco años después, el Barça se encuentra en la paradoja de forzar la salida del francés para tratar de incorporar al delantero, actualmente en el Arsenal.

Las cosas han cambiado mucho en este lustro. El jugador que no quiso el Barça en su día a muy buen precio es ahora el objetivo prioritario de un club que empieza ver claro que la operación para traer a Morata (que era el plan A) se complica porque el Atlético de Madrid no parece dispuesto a facilitar la operación.

En 2017, Dembélé y Aubameyang eran dos de los delanteros de moda en Europa. El primero acabó el curso con 10 goles y 21 asistencias. Su compañero en ataque fue el principal beneficiado del rendimiento del francés: acabó la temporada con 40 goles (31 en la Bundesliga, donde fue el máximo goleador). A día de hoy, la situación de ambos en Barcelona y Londres es insostenible.

Al límite. Aubameyang no aguanta más en el Arsenal. Su relación con el técnico Mikel Arteta es inexistente y no cuenta para el equipo. A sus 32 años, quiere jugar y reivindicarse. España, por otra parte, siempre ha sido su destino soñado. De hecho, es español por parte de madre, habla perfectamente castellano y tiene una residencia de verano en la localidad catalana de Sitges. Eso favorecería que pueda jugar en el Barcelona, aunque ese no era su plan previsto. Por cariño a su madre y a su abuelo materno, que eran incondicionales seguidores del Real Madrid, su objetivo era fichar por los blancos.

Pero la operación, que es la que toma más cuerpo ante las dificultades para que Morata consiga el permiso del Atlético, depende de que Dembélé se marche del Barcelona antes del lunes. Si el francés no se mueve, el club catalán no tendrá margen de maniobra para fichar a nadie. Y entonces, ni uno ni otro tienen opciones de jugar más este curso.