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ATLÉTICO DE MADRID-VALENCIA

1x1 del Atlético: Carrasco, Cunha y Correa lideran la remontada

El equipo rojiblanco dejó una primera mitad muy mala y volvió a encajar en los dos disparos. Pero cambió la cara y apretó espoleado por la afición tras el descanso.

Oblak: Otro partido más que cada llegada del rival provoca pesadillas y goles, aunque poco puede hacer el portero ante tal desidia y nivel defensivo. Musah aprovechó una contra para rematar dentro del área al primer palo entre Vrsaljko y Koke y Hugo Duro definió a la segunda en un mano a mano después de otra acción desastrosa de sus zagueros. El equipo se volcó en ataque en la segunda mitad y pudo ver desde su portería la remontada.

Vrsaljko: La ausencia de un sustituto de Trippier y la lesión del comodín Llorente le abre las puertas de la titularidad en el lateral derecho. Apenas pudo sumarse en ataque y no se esperaba la maniobra de Musah para marcar el primero del Valencia. Salió sustituido tras un par de buenos cruces como último hombre.

Giménez: El Atlético está horrible en el centro de la zaga y ni la presencia del uruguayo es capaz de resolverlo. Se siguen contando las horas para que pueda formar con Savic en la pareja más segura, pero ahora Simeone tendrá que rezar para que el uruguayo no sufra percance alguno con su selección. Un balón suelto que nunca puede pasar entre los dos centrales acabó con el gol de Duro.

Hermoso: Había entrado bien al partido, con la confianza de tener a su lado a Giménez, pero comete una y otra vez un error de infantil, saliendo de sitio para intentar adelantarse a la jugada y perdiendo los duelos, como sucedió en la jugada del gol de Musah. Los errores de los zagueros, con Hermoso y Felipe saliendo señalados en varios de ellos, son una losa para el equipo. Tampoco salió bien parado en el segundo gol, con un mal despeje y después un balón interior entre él y Giménez. Pero reseteó tras el descanso y se repuso con un gol de oro que le devuelve la confianza. Con el regreso a los tres centrales pudo desplegarse mucho en ataque en la banda izquierda, donde fue mejorando y sumándose con peligro al ataque hasta desatar el delirio del Wanda Metropolitano aprovechando un disparo defectuoso de Cunha. Corazón para reponerse.

Lodi: Simeone ha recuperado la defensa de cuatro y el brasileño es el único lateral izquierdo puro de la plantilla, algo que puede cambiar en este mercado invernal. Intenta abrir el campo y dar una salida en ataque, pero apenas pudo aportar peligro y salió sustituido en el descanso.

Koke: Al equipo le está costando muchísimo construir en el medio, sin claridad de ideas ni capacidad para adueñarse de los partidos. El capitán vio una amarilla en la primera mitad por una dura entrada a Carlos Soler y luego intentó que el balón pasase por él, ya que De Paul no estaba para nada inspirado. En la segunda mitad el equipo se volcó con todo e intentó que el juego cayese por Carrasco, el más inspirado. En ocasiones se queda como último hombre, todo un peligro teniendo en cuenta su velocidad.

De Paul: Su nivel está lejísimos del mostrado con Argentina. Un fichaje en el que había puesto muchísimas esperanzas, pero que le está costando mucho hacerse con los mandos del centro del campo. Acabó jugando como carrilero derecho, con problemas para sujetar a Guedes pero mostrando carácter y consistencia. Partido muy gris, quizás, su peor encuentro como rojiblanco pero que se vio remendado con la remontada.

Carrasco: El jugador del partido. Se echó al equipo a la espalda con una segunda mitad prodigiosa. En la banda derecha parece que pierde radio de acción y capacidad de entrar en juego. Comenzó como interior, dejando a Lemar la izquierda y tratando de ayudar mucho a Vrsaljko. Con el transcurso del partido y los cambios fue acercándose a la izquierda, donde mejoró muchísimo y se convirtió en el conductor de los ataques del Atlético. Puso el córner que desembocó en el gol de Cunha y el centro a Suárez en el segundo. Destellos de clase, controles, regates, pidiendo el balón, sin que le queme en los momentos claves… una maravilla.

Lemar: Comenzó como interior izquierdo, intentando concentrar los ataques del equipo por su costado y entrar mucho en juego con João Félix por su perfil. Pero al Atlético le fue costando muchísimo encontrar fisuras y los huecos a la zaga del Valencia. Y, tras el descanso, pasó a jugar como lateral izquierdo hasta salir sustituido. No estaba siendo de los peores.

João Félix: Recibe una somanta de patadas cada vez que entra en contacto con el balón, un jugador castigadísimo por los rivales ante la permisividad arbitral. Era el jugador que más lo estaba intentando, había dejado una buena asistencia para Suárez y la afición no entendió su cambio a los 56 minutos. Pero el equipo pasó a atacar con centros laterales y concentrando efectivos arriba y Simeone vio otras alternativas mejores.

Suárez: Está físicamente con muchas dificultades para competir con los zagueros rivales. Al equipo le cuesta hacerle llegar balones al área y con campo abierto es imposible que gane jugadas. Tuvo su primera ocasión ya en la segunda mitad tras un pase interior de João Félix, pero Jaume le ganó la partida. Y a la segunda, remató por arriba un buen pase atrás de Hermoso de los que el uruguayo no suele fallar. Ahora mismo es difícil sostener su titularidad por delante de Cunha o Correa. Nada que reprocharle en cuanto a la actitud.

Correa y Cunha pusieron mordiente al ataque

Correa: Siempre suma. El cambio para intentar revolucionar el partido en el descanso. Fue consiguiendo entrar más en juego con el paso de los minutos y Jaume evitó a la primera su gol con una fantástica mano, pero no pudo hacerlo en el descuento con un balón suelto que metió para dentro. También dejó un taconazo clave para Cunha en la acción del gol de Hermoso. Un comodín de oro.

Cunha: Trata de aprovechar cada minuto que tiene por lo menos poniendo intensidad, energía y dejándose la piel. Y, a la salida de un córner, aprovechó un balón suelto en el área para conseguir su cuarto gol en Liga. También fue capital en el tercero, donde un mal remate se acabó convirtiendo en una asistencia para Hermoso. Su actitud es aire fresco para el equipo.

Felipe: Pese a que pasa por muy mal momento de forma, Simeone sigue confiando en él. Salió en el minuto 56 para pasar a formar con línea de tres centrales y no le pesó su error en San Sebastián para cerrar y asumir una responsabilidad importante en muchas ocasiones como último hombre. Buena entrada contra el Valencia.

Herrera: Trató de poner pausa y juego al centro del campo, donde al Atlético le falta mucha imaginación y velocidad de juego. Participó en el inicio de la jugada en el segundo, abriendo a Carrasco, y el tercer gol, buscando por dentro a Correa, y va sumando protagonismo.