HUESCA
La metamorfosis del Huesca de Xisco
El entrenador balear ha cambiado por completo la idea original con la que empezó la temporada el equipo oscense. Del fútbol control de Ambriz se ha pasado a un equipo hecho para matar en las contras.
Xisco Muñoz llegó hace tres meses a Huesca con el objetivo de levantar a un equipo que estaba tocado. El entrenador balear comenzó su trabajo por la defensa y armó su proyecto desde atrás. Con el paso de las jornadas ha encontrado en el 5-2-3 su sistema ideal y en ataque ha encontrado en las contras su principal arma.
El técnico de Manacor ha apostado por un equipo más vertical que su antecesor en el cargo, un Nacho Ambriz que apostó en sus doce partidos como preparador por el fútbol control. Xisco suma once choques como azulgrana, con un balance de tres victorias, seis empates y dos derrotas y con un balance de diez goles a favor y ocho en contra. Una travesía que le ha servido al entrenador para conocer a su plantilla y probar a todos sus futbolistas con diferentes sistemas.
En Cartagena el equipo altoaragonés disputó su mejor partido de la temporada y realizó el partido que Xisco quiere que sea el ejemplo a seguir en lo que resta de curso: sobrio en defensa y letal a la contra. Para armar ese proyecto el Huesca está dispuesto a realizar un esfuerzo económico en este mercado invernal.
Tras la llegada de Lago Júnior, los oscenses buscan cuatro refuerzos que puedan armar el proyecto de Xisco. La dirección deportiva busca un defensa central, un centrocampista y dos futbolistas ofensivos que puedan marcar las diferencias en la categoría. Futbolistas que llegan para completar la metamorfosis que comenzó Xisco cuando llegó al Huesca.