BARCELONA
La noche más larga de Xavi
Volvió a ver el partido de madrugada nada más aterrizar en Barcelona y no pudo conciliar el sueño hasta las ocho de la mañana.
Xavi Hernández salió del Sánchez Pizjuán con sentidos contrapuestos: orgulloso por la imagen ofrecida por el equipo pero abatido porque se le escapó la posibilidad de acabar el año en zona Champions. Tanta era la desazón del técnico blaugrana que ya en la rueda de prensa reconoció que le iba a costar dormirse ante el cúmulo de sensaciones que vivió en el estadio del Sevilla.
Y la verdad es que la noche fue especialmente larga. Y no sólo porque empeoró su resfriado con el diluvio que soportó estoicamente en su área técnica -se hizo una PCR un día antes del partido que dio negativo-, sino porque el equipo tuvo más cerca que nunca esta temporada ponerse otra vez entre los cuatro mejores de LaLiga.
Antes de coger el avión, Xavi felicitó a sus jugadores, "habéis devuelto el orgullo a la afición y eso no tiene precio", aunque lamentó no haber podido rematar la faena con los tres puntos, "ha sido una pena porque lo hemos tenido tan cerca...". Después, ya en el vuelo de regreso a Barcelona, una nueva cumbre con el presidente Joan Laporta y con el director de fútbol Mateu Alemany para seguir trabajando en las altas y bajas que se han de ejecutar este enero para mejorar la plantilla.
La expedición blaugrana aterrizó al filo de las tres de la madrugada en el aeropuerto de El Prat, dirigiéndose posteriormente a la Ciutat Esportiva para recoger los vehículos.
Cuando Xavi llegó a su domicilio, casi a las cuatro de la madrugada, todavía le estaba dando vueltas al partido. Tanto es así, que según ha podido saber AS, el técnico decidió ver de cabo a rabo todo el partido. Tras volver a verlo, se ratificó en sus sensaciones que el Barcelona fue muy superior al Sevilla y que el equipo ha mejorado notablemente en prestaciones y entendimiento del juego de posición.
Tras ver el partido, Xavi decidió dar por concluida la noche, en un horario más de propio de un joven con las hormonas alteradas que de un entrenador de fútbol. Su móvil marcaba las 07.50 horas.