Osasuna pierde fuelle
El equipo rojillo firmó este domingo una nueva derrota a manos del Getafe para alcanzar las nueve jornadas sin conocer la victoria. No suman tres puntos desde el 17 de octubre.
Osasuna firmó este domingo una nueva derrota a manos del Getafe para alcanzar las nueve jornadas sin conocer la victoria en las que el equipo que dirige Jagoba Arrasate ha ido perdiendo la fuerza con la que comenzó el curso.
Tras amarrar la permanencia de forma holgada la pasada temporada a pesar del gran bache que atravesó la entidad (12 partidos seguidos sin ganar), Osasuna comenzó la presente campaña con la lección aprendida y con ganas de no sufrir sumando puntos poco a poco.
El brutal inicio lejos de El Sadar con cuatro victorias ante el Cádiz, Alavés, Mallorca y Villarreal ilusionó a una hinchada que vio a su equipo en quinta posición, motivo por el cual todo hacía pensar que este año podía ser el del regreso a competiciones europeas. Pero en el Estadio de la Cerámica acabó todo.
El pasado 17 de octubre Osasuna logró su última victoria gracias a los tantos de Lucas Torró y Chimy Ávila en el minuto 87. Por aquel entonces, los pupilos de Arrasate exhibían un juego dinámico y alegre a la par que agresivo y con una gran presión que incomodó a todos sus oponentes.
Además de los puntos dejados de sumar en los cinco empates y cuatro derrotas que se han ido sucediendo hasta ahora, los rojillos han perdido mordiente y efectividad de cara a puerta. Con la cita de ayer, Osasuna acumula cinco partidos sin marcar lejos de su estadio (siete horas), un dato que habla del poco peligro que está creando el equipo en la portería ajena.
Parecía que gracias al empate ante el Barcelona y la victoria en A Coruña de la Copa del Rey, Osasuna contaba con la confianza necesaria para encarar el partido del Coliseum con el mayor de los optimismos. No fue así y la plantilla volvió a demostrar carencias en cuanto a ideas y ambición por buscar la meta contraria con más ahínco.
El colchón de puntos con el que contaba el equipo respecto al descenso parece que se va a agotando, por lo que deberán, con la entrada del nuevo año, recuperar las sensaciones y el enérgico ritmo que tanto gustó asus socios y que tan buenos resultados ha dado.
La confianza en el técnico de Berriatua es plena por parte de jugadores, aficionados y directiva, y el tiempo, el trabajo y el atrevimiento que demuestre el equipo a lo largo de los próximos meses seguro devolverán a Osasuna a su verdadero destino final, la salvación.
Los de Tajonar estrenarán el año 2022 jugando en El Sadar el 3 de enero. El Athletic de Bilbao visitará Pamplona para disputar un partido de alta tensión entre dos equipos que mantienen una especial rivalidad y en el que los locales tratarán de sobrepasar a los vizcaínos en la tabla clasificatoria con tres nuevos puntos dos meses y medio después.