LAS PALMAS
Las Palmas pide la Navidad
Los amarillos en dinámica salen de la promoción tras trece jornadas consecutivas en ella, aunque siguen igualados en puntos con el sexto.
Una vez se terminó la travesía en la Copa, tocaba ponerse el traje de liga hasta el final de temporada. “Nosotros tenemos que tener claras las prioridades”, había manifestado el técnico amarillo antes de enfrentarse al Valladolid. Y dichas prioridades son la de pelear por el ascenso a Primera y en cortísimo plazo pasaban por vencer al Eibar y terminar entre los seis primeros antes de Navidad. Cumpliendo una doble meta en el final de la primera vuelta y parón liguero.
Un objetivo que permitiera encarar este descanso con las sensaciones del mantenimiento de las victorias en casa que fundamenta esa lucha por el ascenso. Así pues, con solo un partido por delante para cerrar la primera vuelta la idea de irse a navidad entre los seis primeros estaba al alcance de la mano. Aunque se llegaba con tres rivales a tiro de resbalón por detrás, Oviedo, Girona y Burgos, estos dos últimos jugando entre ellos.
Si bien comentó Mel, hace unas semanas que si acaba la primera vuelta “nos vamos en puestos de playoffs nos tenemos que ir tranquilos, pero si no fuera así, si nos vamos séptimos u octavos a uno o dos puntos, también”. Pues su plan pasa por “estar ahí para el esprint final”. Anoche en la rueda de prensa siguió mostrando optimismo de cara al futuro pero comentó: “nos viene bien irnos, nos viene bien olvidarte un poco del fútbol”. Con la sensación del equipo que pide la hora para poder irse al descanso.
Un dato que apoyaba al discurso del técnico estaba en que en tres de las cuatro veces anteriores que los grancanarios empezaron entre los siete primeros la segunda vuelta disputaron la promoción. En la 12-13 cuando caería en las semifinales ante el Almería (6º), en la 13-14 (7º) cuando se quedó a un minuto de ascender ante el Córdoba y en la 14-15 (1º) cuando conseguiría subir a primera división. La única vez que el equipo no jugó los ‘playoffs’ sería en la 19-20 (7º) cuando concluiría noveno a un partido de la sexta plaza.
Así pues, aunque en puntos está empatado con el sexto, ha habido una evolución negativa en cuanto a objetivos a cortos plazos, pues ha pasado de estar peleando por la segunda plaza en la jornada 14 a estar haciéndolo por entrar en la promoción. Marcando un diferencial con el Eibar, a falta del partido de la Ponferradina, de ocho puntos con los armeros, cuando estuvo a uno solo a principios de noviembre.
Con el espíritu del boxeador exhausto llega por tanto Las Palmas a Navidad y como decía su entrenador, “empezar otra vez de cero. Tenemos los mismos puntos que el sexto clasificado y queda mucha liga porque en Segunda División esto se hace muy largo”. Necesita recuperar energías porque a la vuelta de la esquina esperan el Tenerife y el Almería, con unos datos que no invitan al optimismo, no ha ganado un derbi en la isla vecina en el que se haya podido pagar en euros, se cumplen 20 años este 22 de diciembre, y el Almería no pierde de visitante desde el 15 de octubre, la jornada siguiente al empate in extremis de los amarilllos en los Juegos del Mediterráneo. Le espera pues a Las Palmas una vuelta de Navidad cargada de regalos.