Pues no, resulta que no era ninguna locura
El partido frente a un muy buen Rayo Majadahonda ha demostrado que el Racing hará muy bien en apostar por sí mismo a la hora de encarar los próximos duelos
Y si...
¿Y si el Racing hubiera saltado al campo frente al Unionistas, que es mucho peor que el Rayo Majadahonda, con la misma propuesta que ayer hubiera ganado? Tal vez no, pero era lo suyo. ¿Y si en el José Zorrilla hubiera estado Pablo Torre en el equipo titular el Racing no habría hecho el ridículo? Pues quizá no hubiera cambiado el cuento, pero era lo suyo. Lo de ayer, un Racing jugando a ser el Racing pretendiendo ser mejor que el contrario apostando por sí mismo y no por anular al rival es el camino a seguir.., aunque habrá partidos que se pierdan, por supuesto. El Extremadura ha ganado en Logroño. Y seguro que está de subidón. ¿Y qué? Mi apuesta es por más Racing. Seguro que los que aplaudían en píe a Pablo Torre al retirarse también apostarían todo al verde.
Los (no) cambios delatores
La mejor muestra del diferente talante con el que el míster racinguista afrontó el partido ante el Rayo Majadahonda respecto a los dos anteriores (sobre todo, pero en el resto de los partidos también ha hecho muchos cambios defensivos para cerrar partidos) son los cambios que no hizo. O, mejor dicho, que hizo mucho más tarde de lo que nos tiene acostumbrados. El no meter a Fausto Tienza al campo cuando era evidente que Borja Domínguez estaba desbordado defensivamente, aguantar la tentación de quitar a Pablo Torre hasta el 87' (jugó más que nunca, y eso que llevaba diez minutos boqueando), e incluso no meter a Mantilla hasta ese mismo 87', cuando tenía tres defensas sufriendo (¡gracias Abel por quitar a Mawi!) hablan del otro Romo. Como hube de aclarar en sala de prensa, este es un comentario positivo. Y no porque se ganara, sino porque intentó ganar marcando un gol más y no, como otras veces, encajando un gol menos.