La Fiore quiere resolver el absurdo caso Mayoral
Mourinho le negó los Juegos e impidió su venta, pero nunca cuenta con él a pesar de sus 17 goles en el curso pasado. La Viola, al acecho.
Borja Mayoral no imaginaba que la llegada de Mourinho le habría complicado tanto la vida. El portugués quiso fichar a dos delanteros, Abraham y Shomurodov, algo que redujo muchísimo sus posibilidades de tener protagonismo, y antes del cierre del mercado el español tuvo la oportunidad de marcharse al Crystal Palace, que le ofrecía un sitio como titular. El portugués se opuso públicamente a su venta: "Cuento con Borja: tiene calidad y trabaja bien, no quiero que se marche. Necesitamos tres delanteros. Quedarnos solo con dos es un riesgo".
El entrenador hasta le impidió participar en los Juegos de Tokio (algo que al jugador, obviamente, le decepcionó mucho) para tenerle a disposición desde el primer día, pero sus declaraciones no se convirtieron en hechos. El de Parla ha disputado apenas 100 minutos en toda la temporada, repartidos en siete presencias. Mourinho también le incluyó en la lista de castigados por el 6-1 sufrido ante el Bodo Glimt, dejándole en la grada durante los choques con Nápoles, Cagliari y Milan, a pesar de que Mayoral solo hubiera disputado 45 minutos de aquel encuentro (cuando el marcador aún mostraba un 2-1).
El punta regresó justo en el partido de vuelta con los noruegos, y los nueve minutos que Mou le concedió le fueron suficientes para firmar una asistencia decisiva en el 2-2 de Ibáñez, que evitó otra humillante derrota. Los números de su aventura romana, de hecho, siempre habían sido buenísimos. El año pasado lo cerró con 17 goles y siete asistencias: fue el Pichichi del equipo y nadie podía imaginar lo que está ocurriendo ahora.
Muchos, en la capital italiana, empiezan a dudar sobre los métodos de Mourinho que perdió seis de los últimos 12 partidos. Mientras se le cuestiona, el técnico sigue acusando a los árbitros y a una plantilla a la que define desequilibrada, y la Roma quiere contentarle con al menos tres fichajes en enero. Mayoral, por su parte, busca un nuevo destino, algo que, como adelantó AS ya se intentó en agosto. En Italia muchos dan por cerrada su nueva cesión hasta junio a la Fiorentina, que necesita un punta más allá de lo que pase con Vlahovic, aunque también se sigue hablando del interés del Crystal Palace. Las partes, de momento, no confirman la operación, pero parece claro que la intención de todos es acabar cuanto antes una situación que se ha convertido en absurda.