El filial se erige en una fuente inagotable de talento para Michel
El técnico ha abierto la puerta del futbol profesional a Ureña, Gabri, Artero y Dawda. Están respondiendo y los jugadores del B son la mejor solución al cúmulo de bajas.
Si a un entrenador no le tiembla el pulso a la hora de apostar por los jugadores jóvenes es Michel. El técnico del Girona sabe cuánto cuesta labrarse un futuro en el mundo del fútbol profesional y tiene claro que ‘si lo mereces, juegas’. Es cierto que el momento actual del conjunto rojiblanco es complicado por el cúmulo de bajas que hay en el primer equipo, pero Michel no busca excusas porque sabe que en el filial hay jugadores interesantes de los que tirar. Y, de momento, cuatro (Ureña, Gabri, Artero y Dawda) han caído como un meteorito en el fútbol profesional: rápido y haciendo mucho ruido.
En lo que se lleva de campaña, 15 partidos de Liga, Michel ya ha dado la alternativa cuatro futbolistas del B. Siempre ha defendido el valor de la cantera y cuando le ha aparecido la oportunidad no ha dudado en apostar por ella. Ante las bajas en el primer equipo, jugadores del filial como solución. Fácil, sin inventos ni recolocación de piezas. Los dos primeros en hacerse un hueco en los pensamientos y el esquema de Michel fueron Óscar Ureña y Gabri. El primero ya acumula 355 minutos en Segunda y se le espera con ganas una vez supere su lesión. En cuanto a Gabri, suma 110’ y en la pasada jornada ante el Tenerife tuvo su momento al final.
Los dos últimos en derribar la puerta de Michel han sido Ricard Artero, que a sus 18 años debutó contra el Alcorcón y disfrutó de 18 minutos, y Dawda Camara. Este último, que está a punto de cumplir 19 años, es un delantero con un futuro esplendoroso. Es uno de los máximos goleadores del filial y cuando no ha estado Stuani, Michel le ha visto como su sustituto perfecto. Llegó al Girona en 2014 procedente del Porqueres y los informes que se manejan de él son fantásticos. Uno de sus referentes es su hermano, 16 años mayor, Sile, que lució las camisetas de Banyoles, Figueres y L’Escala.
Pero la cantera del Girona parece inagotable. Si en cursos anteriores aparecieron, y ahora están asentados en el primer equipo, jugadores como Ibrahima Kebe, Ramón Terrats y Arnau Martínez, hay otros que están esperando su oportunidad para seguir los pasos de Ureña, Gabri, Artero y Dawda. Los ejemplos más claros son Arnau Ortiz y Álex Sala. No es extraño verles en las convocatorias del primer equipo este año, pero aún no han recibido la alternativa. Michel les tiene muy presentes porque su aportación al primer equipo en los entrenamientos es de categoría. Pero no hay que tener prisa, paciencia. Plan sin plan, día a día.