Aprobados y suspensos de un reencontrado Espanyol
Los blanquiazules, con las asistencias de Darder, la cabeza de RdT y el crecimiento de Pedrosa sigue en la buena línea en su estadio. Yangel, notable.
Diego López: Cegado por el sol durante el primer tiempo, cuando defendió la portería de Cornellà, se mostró seguro en los centros del Granada. No llegaron con especial peligro los andaluces, dominadores de la posesión, pero no de las áreas. En el minuto 58 hizo una estirada después de un centro de Luis Suárez que levantó los cánticos de “Diego, Diego”. En los últimos 15 minutos hizo otras dos paradas de mérito. El gallego, que esta semana cumplió 40 años, está en gracia.
Aleix Vidal: Aunque sufrió en algunas acciones defensivas por la velocidad de Neva y especialmente Luis Suárez, su papel fue notable en el primer tiempo. Llegó a la línea de fondo y puso centros de calidad, uno de ellos en el minuto 20 que estuvo a punto de suponer el primer tanto de RdT. En la segunda mitad, más comedido, siguió padeciendo por la velocidad de Luis Suárez.
Sergi Gómez: A diferencia de Getafe, donde estuvo blando en algunos duelos y dubitativo, el central catalán ofreció su mejor cara en Cornellà. Se anticipó y realizó buenas coberturas a los laterales. Seguro en todo momento y más preciso con el balón. Se relacionó con la segunda y la tercera línea de ataque con más facilidad.
Cabrera: Bien por el juego aéreo y poco exigido con balón, el uruguayo tuvo una tarde fácil en el RCDE Stadium donde transmitió de nuevo su habitual seguridad. Ayudó en el segundo tiempo y tras el 2-0 a que la defensa replegada del Espanyol no se desordenara gracias a su capacidad de mando.
Pedrosa: Un cañón por la izquierda. Rápido, puso centros de calidad como uno al segundo palo en la primera mitad que Yangel remata fuera. Su gol es una obra de arte. Por la estrategia, el centro de Darder y el golpeo del lateral zurdo, que además de juego y seguridad ya aporta goles. En el minuto 88 hizo una galopada de 50 metros cuyo centro fue a córner y la afición le ovacionó.
Keidi Bare: Aunque con el balón le falta finura en ocasiones para resolver las jugadas a menos toques y con más claridad, su labor permitió que los laterales se desplegaran. Voluntarioso en la presión, reapareció de titular tras su lesión y estuvo algo acelerado, como en una acción en la que se las tuvo con Luis Suárez. El VAR no revisó la jugada. Luego vio una amarilla y fue sustituido por David López.
Herrera: Poco participativo en las posesiones del Espanyol, aportó su llegada al área como un remate de cabeza que se le fue por medio metro u otros duelos en los que se impuso debido a su físico. En la segunda mitad, incluso, anotó un golazo después de una carrera de 70 metros pero fue anulado por fuera de juego. Acabó fundido y sustituido. Mostró todo lo que puede aportar al Espanyol.
Darder: Su pierna derecha hizo méritos para acabar en un museo. Sus dos asistencias a Pedrosa y, especialmente, a RdT fueron mágicas. Dos chispazos precisos que desencallaron el encuentro. Más liberado al partir del minuto 70, con los cambios de Moreno, se fue al ataque al tener la espalda cubierta.
Embarba: Sigue estando negado con el gol, pero no fue por intentos. Después de dos centros peligrosos en la primera parte, en la segunda tuvo hasta tres lanzamientos en los primeros cinco minutos de partido. Se fueron desviados o los detuvo Maximiano.
RdT: Incisivo como de costumbre después de cumplir un partido de sanción, tuvo hasta cinco remates que flirtearon el gol. Lo encontró después de un preciso centro de Darder, que RdT desvió de cabeza con la precisión de un cirujano. "Tiene una bota en la cabeza", decía Pandiani. Los otros se estrellaron en el poste, rozaron el palo o los desvió Maximiano.
Puado: Regresaba a la titularidad después de su proceso de recuperación tras una pubalgia, y el delantero cumplió. Sin tener excesiva presencia en el área, demostró su velocidad y trabajo defensivo por el costado izquierdo. Fue sustituido por Nico Melamed.
Nico Melamed: Como acostumbra a suceder cuando sale en las segundas partes, Melamed encuentra espacios. Se siente como pez en el agua. Corre, regatea y busca portería con su particularidad habilidad. Varios caños y algunas asociaciones con RdT levantaron los aplausos.
Morlanes: En vez de mirar siempre adelante, el zaragozano miró en ocasiones atrás. Eso calmó el juego de un Espanyol acelerado en el segundo tiempo. Le dio calma al juego tras entrar a partir del 72, y el equipo lo agradeció.
David López: Más respaldado por Morlanes, le vino bien a David López para quitarse la espina de Elche. El mediocentro incluso tuvo un remate de cabeza franco que detuvo el portero. Ayudó a defender el juego aéreo y ordenó al equipo en los minutos que jugó.
Dimata: Lo intentó con un remate cruzado en un partido ya totalmente roto.
Wu Lei: Un tiro blando a las manos del meta del Granado fue lo único que pudo hacer en los últimos minutos de partido.