Los 400 partidos de Pepe Mel como entrenador en Segunda

El entrenador amarillo Pepe Mel cumplió el pasado viernes cuatrocientos partidos como entrenador en Segunda. Todo un hito al que el técnico quita importancia “eso significa que estoy muy mayor ya, que me estoy haciendo viejo”. Quizá la ambición que emana de sus ruedas de prensa se explica también porque, como es muy lógico, “los más bonitos son los casi doscientos que he hecho en Primera y los que hice en la Premier”. Por lo que le importaba más la victoria que la cifra “los números que tenga el entrenador ya es lo de menos”.

En busca de ese objetivo esta temporada se encuentra el técnico que lleva en la U.D. desde marzo de 2019 y que ha dirigido a los amarillos en liga 111 ocasiones. Y es que bobili, bobili —equivalente canario a piano piano si arriva lontano— el madrileño se ha colocado en el cuadro de honor de los entrenadores de Las Palmas como sexto técnico con más partidos a 25 encuentros de Sinibaldi por lo que no sería de extrañar que pudiera concluir la temporada siendo el técnico que haya dirigido más encuentros a los grancanarios pues restan aún 29 jornadas. Además, en la Liga Smartbank ya ha alcanzado la segunda posición y se ha situado a poco más de una decena de Juan Manuel Rodríguez —actual entrenador del filial—.

Pero para alcanzar esta cifra de 400 encuentros en Segunda, Mel ha recorrido un camino que empezó en Murcia un 1 de octubre del año 2000 sustituyendo a Crisipi, en los que dirigió a los pimentoneros 38 partidos. Desde esa temporada a la actual no ha estado ni una sola temporada sin entrenar pasando por Primera, Segunda y Segunda B. Tras su paso por el Tenerife —en Primera División—, volvería en la 2002-2003 a la categoría de plata para comandar el Getafe a partir de la jornada 20. El curso siguiente iría al Alavés, su primera vez en Segunda que dirige de inicio a fin y que repetiría en la 2004-2005 con el Poli Ejido. Continuaría la temporada siguiente con los almerienses, aunque aquí paró su racha.

Regresó a la categoría, tras su paso por Segunda B donde entrenó y ascendió al Rayo. En su vuelta —temporada 2008-2009— dejó a los vallecanos quintos. Continuó con los madrileños el curso siguiente, pero no llegó a la jornada 42. Sin embargo, uno de sus grandes hitos estaba a la vuelta de la esquina. En el verano de 2010 firmó por el Betis, equipo que devolvió a la Primera División con honores. Campeón de Segunda. No pisa de nuevo la categoría hasta enero de 2015 cuando los sevillanos vuelven a reclamar sus servicios. En los 24 encuentros tras su regreso al Benito Villamarín dirigió 26 partidos, ganó 15, empató 6 y perdió 3. Nuevo ascenso. Nuevo campeonato de Segunda. De nuevo se ausenta de la categoría varias temporadas hasta que la U.D. Las Palmas le contrata en la 18-19 y en Gran Canaria sigue, este año con la idea de pelear por su tercer ascenso.