Peter lanza señales a Ancelotti
El extremo del Castilla sigue creciendo a toda velocidad. Le hizo dos golazos al intratable Villarreal B, le da un respiro a Raúl y muestra credenciales de primer equipo. Es un ciclón.
Si Ancelotti no termina de tener del todo claro qué atacante ubicar en la banda derecha, la solución puede que esté en el Castilla. Peter Federico pasó como un bulldozer por encima del Villarreal B, un equipo que había ganado ocho partidos y empatado el restante. Números que destrozó el extremo castillista con dos goles de futbolista superior. Dos zurdazos como dos torpedos al mini Submarino.
Peter se erigió en el canalizador del peligro de un Castilla que salió con un once, de nuevo, arriesgado. Theo Zidane repitió de inicio aunque continúe sin mostrar más que un apellido glorioso y también el juvenil Mario Martín. La noche de perros empezó a adquirir tintes dignos de Halloween para el filial blanco cuando Tasende (hermano de Angeliño, del Leipzig) les hizo el 0-1 en el minuto 4. Un preaviso de que el sexto partido consecutivo de los muchachos de Raúl sin ganar estaba en camino. Para más inri, con dos excanteranos blancos en el bando groguet, De la Fuente y Arana. Era cuestión de que alguien evitara un aquelarre amarillo y fue Peter el que dio ese paso. Primero con un sortilegio a base de bicicletas y amagos a Tasende antes de clavar el empate de un zurdazo y luego con la misma herramienta, esta vez en una gran conducción por el carril central, el 2-1 justo en el minuto 45. Un portento y una llamada futbolística a Carletto.
Un Castilla en modo jefe
La segunda parte y con Peter insistiendo freír a sus marcadores a base de regates, Raúl apretó clavijas tácticas con Aranda para intentar ponerle el lacito al encuentro. El Villarreal B también se aplicó en cambiar el ritmo, aunque la poca presencia de su brújula, Carlo, se notó. Las ocasiones fueron fluyendo, pero en sentido castillista. Latasa, con un juego espectacular de espaldas, Arribas vampirizando la pelota y Rafa Marín, pastoreando todo lo que sucedía en defensa, provocaron dudas en un equipo amarillo al que nadie había tosido en toda la temporada. El Villarreal B achuchó en los últimos cinco minutos pero entre Marín y hasta Peter de lateral para cerrar huecos, el filial que sobrevivió fue el blanco.
El Castilla se evita pesadillas, el Villarreal B pese a la derrota es un equipo que va a pelear el ascenso y Peter Federico emerge como el canterano más caliente de La Fábrica. Está, o al menos eso se ve en su fútbol, para lo que le echen.