LEVANTE 2 - ATLÉTICO DE MADRID 2
Iturralde González: "Es mano"
El colegiado de AS y Carrusel considera que González Fuertes acertó al señalar penalti para el Levante: "No hay discusión. Como se está pitando es mano y no es amonestación porque no va a portería".
La polémica en el Levante-Atlético de Madrid llegó en el tramo final del encuentro. Con 1-2 en el marcador a favor de los colchoneros, González Fuertes, árbitro del encuentro, señaló un penalti en el minuto 85 a favor de los granotas tras un centro de Morales que Lodi toca con la mano ante De Frutos. El colegiado acudió al monitor para revisar la jugada y señalar la pena máxima. Bardhi fue el encargado de lanzarlo y conseguir su doblete desde los 11 metros ante Oblak.
Para Iturralde González, colegiado de AS y Carrusel, el árbitro del encuentro acertó en su decisión: "Este tipo de manos cuando vas a disputar un balón con la mano abierta que ocupa un espacio y te haces más grande, que está casi encima del hombro, este tipo de manos se están pitando no vale decir que se están cargando el fútbol. Tienes que acoplarte a como se está pitando y esta mano nos guste o no nos guste es mano. No hay discusión. Como se está pitando es mano y no es amonestación porque no va a portería, el balón va hacia fuera, pero mano te guste o no te guste se está pitando".
El colegiado de AS y Carrusel consideró sobre la jugada: "Según están interpretando el reglamento, que la regla 12 ha cambiado, se considerará que un jugador ha ocupado más espacio de manera antinatural no sea consecuencia de su cuerpo. Ahora las manos las tienes que peritar según la acción. Le llaman porque las directrices de sus jefes son de llamarle. La mano si va a gol es para amonestar. Yo lo hubiese llamado. Si algún día viene otra dirección arbitral y viene con otro criterio sobre las manos habrá que adaptarse al criterio".
Tras el polémico penalti, Ángel Correa vio la tarjeta amarilla por protestar la decisión del árbitro. Una vez que terminaron los ocho minutos de añadido, los jugadores del Levante Rober Pier, Vezo y De Frutos se quejaron al árbitro por pitar el final del encuentro y no dejar que los de Orriols continuaran con la jugada. Pier levantó los brazos y vio la segunda amarilla una vez finalizado el encuentro. El defensa del Levante vio la primera amarilla en el minuto 95, tres antes de que acabara el partido. El jugador se retiró al túnel de vestuarios entre protestas.