El recital del central David García en el Santiago Bernabéu
El defensa navarro realizó 15 despejes, bloqueó dos tiros y ganó cuatro juegos aéreos
David García ofreció ayer en el Santiago Bernabéu un espectacular recital, mostrando todas las cualidades que se le pueden exigir a un central y dejando muy claro cómo debe defender un equipo en bloque. Poco le importó al navarro tener que frenar a jugadores de la talla de Benzama o Vinicius. Ahí estaba él, en todas. En cada despeje, en cada balón, anticipándose, mostrando un grandioso juego aéreo. Los números no engañan y durante los noventa minutos realizó 15 despejes, ganó cuatro juegos aéreos y bloqueó dos tiros. Tal vez Luis Enrique debería plantearse incluirlo en la próxima convocatoria de la Selección.
A menudo aparece en los onces ideales de la jornada y es que además de defender, ha anotado ya dos goles, frente a Cádiz y Alavés y ha jugado todos los minutos de los 11 partidos de Liga disputados.
En mayo el club renovó su contrato hasta 2026 y el central navarro afirmaba entonces: “Estoy muy orgulloso y muy feliz de poder estar cinco años más en el club de mi vida, en el que he soñado siempre estar, en el que llevo 17 años y voy camino de otros 5 más. Ha sido una trayectoria bastante intensa. Ha habido varios ascensos y descensos y parece que no tenemos un año tranquilo. Son situaciones y momentos que le van pasando a uno a lo largo de su carrera, pero lo importante es ser feliz y disfrutar del día a día”.
David García es jugador de Osasuna desde los 9 años. Con sólo 16 años debutó en Segunda B con el Promesas y a los 20 le llegaría su oportunidad en la primera plantilla. El 30 de agosto de 2014 se estrenó con el primer equipo en La Romareda a las órdenes de Jan Urban. Fue uno de los héroes de aquella permanencia agónica, con sendos goles en la penúltima jornada para derrotar al Recreativo de Huelva y, sobre todo, en el último partido en Sabadell, cuando un cabezazo suyo abrió la puerta de una salvación que certificaría el histórico gol de Javier Flaño.
La temporada 2015/16 fue la de su consagración, siendo titular indiscutible en un equipo que logró el ascenso a Primera División. Sin embargo, su debut en la máxima categoría no sería el esperado, ya que a las dificultades que tuvo el equipo se añadió una lesión en la rodilla que le mantuvo alejado de los terrenos de juego durante unos meses. Después de una cesión a la Cultural Leonesa en el mercado invernal. Regresó a la disciplina rojilla en plenitud y para volver a tener un papel protagonista. Fue una pieza clave del retorno de Osasuna a Primera División en la temporada 2018/19 y lo ha seguido siendo en las últimas temporadas, en la máxima categoría del fútbol español.