El Clásico de Lucas
El jugador gallego se empezó a ganar la renovación con el Real Madrid en el duelo del Camp Nou de hace justo un año, brillando como improvisado lateral derecho.
El domingo llega el Clásico, Barcelona-Real Madrid en el Camp Nou a las 16:15 horas, un partido que acostumbra a definir las temporadas de ambos equipos y que el curso pasado marcó claramente el camino y la carrera de Lucas Vázquez. El gallego, probable titular en el lateral derecho del Real Madrid (dependerá de si Ancelotti quiere una alternativa más ofensiva o tira de Nacho para contener a Ansu Fati), se empezó a ganar la renovación de blanco el 24 de octubre de 2020 en el Camp Nou, justo un año antes del inminente duelo.
Aquel Clásico (triunfo por 1-3 del Madrid) lo arrancó Lucas en el banquillo. Con Carvajal lesionado, Zidane eligió a Nacho para proteger la banda derecha, pero a los 43 minutos tuvo que retirar al alcalaíno por problemas musculares. Sin opciones naturales entre los suplentes, el francés eligió a Lucas. Y el gallego, pese a la inexperiencia en el puesto, se salió: contuvo perfectamente los ataques del Barcelona y fue en sí mismo una solución ofensiva más, incorporándose mucho y con peligro. Sirvió dos balones que no terminaron en gol por la intervención del portero Neto, uno para Sergio Ramos y otro para Kroos.
Tan satisfecho quedó Zidane con la actuación de Lucas que, en lo restante de temporada, prácticamente no volvió al ataque y actuó casi siempre como defensor. Curiosamente, su progresión se cortó en el otro Clásico, en Valdebebas el 10 de abril (2-1 para el Madrid). Estaba siendo de los mejores y asistió a Benzema para que hiciese el 1-0 de tacón, pero una fuerte entrada de Busquets le forzó a pedir el cambio y no le permitió volver a jugar ese curso. Sin embargo, la semilla ya había sido plantada.
El Madrid renovó al Lucas lateral
Lucas finalizaba contrato en junio de 2021 y las negociaciones para su renovación arrancaron con muchas dificultades. El Madrid hizo una oferta inicial a la baja que el gallego rechazó, lo que dio paso a una calma tensa, a la espera de acontecimientos. Sin embargo, su partido en el Camp Nou y el posterior desarrollo del curso fueron vitales para que el Madrid se decidiese a subir la oferta, sustancialmente: cinco millones netos al año, menos el 10% que el club pidió al vestuario para cuadrar las cuentas ante el impacto de la COVID-19. Lucas firmó hasta 2024.
Y es que la principal duda en el Real Madrid estaba en su superpoblación de atacantes: junto a Lucas, la plantilla cuenta con Bale, Hazard, Vinicius, Rodrygo, Asensio... Todos hombres de banda con mayor proyección, por edad, que el gallego. Pero su reconversión a lateral de buen pie convenció al club de que era la mejor alternativa para competir por el puesto con Carvajal, que además tiene una peligrosa tendencia a las lesiones musculares. Lucas se empezó a ganar su nuevo contrato de blanco en el Camp Nou, contra todo pronóstico.