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ATLÉTICO DE MADRID

El Atlético se gusta en ataque... pero se descompone atrás

El equipo rojiblanco está encontrando la mejor versión de João Félix, un Lemar extraordinario, Carrasco, Griezmann, De Paul... pero los fallos atrás condenan.

Oblak encaja el gol de Keita.
JUAN MEDINAREUTERS

Un Atlético de dos caras. Es la sensación que dejó el equipo de Simeone, mostrándose mucho más cómodo cuando buscó atacar con balón, con la combinación de sus jugadores en la parcela ofensiva, pero que sufrió una barbaridad en un inicio de partido muy metido atrás y con muchas dudas defensivas hasta despertar ya con un 0-2 en el marcador. Cuando el equipo había conseguido la gesta de igualar esa desventaja con el todopoderoso Liverpool, una jugada desafortunada de Griezmann que provocó su expulsión con 39 minutos por jugarse y un error atrás de Hermoso con un penalti muy tonto conllevaron la derrota del equipo pese a haber dejado una gran imagen.

Esa carga desproporcionada e incomprensible del central madrileño a Diogo Jota no fue el único fallo rojiblanco en la retaguardia. Con Savic sancionado y lesionado y Giménez saliendo de unos problemas musculares, Simeone tuvo que mover sus piezas para intentar encajar a Kondogbia en la línea de tres centrales. Pero esa zaga formada por el habitual pivote, Felipe y Hermoso comenzó muy nerviosa, mal colocada y poco contundente en los despejes. De un mal golpeo de Felipe surgió el segundo gol del Liverpool, con un balón muy bien enganchado por Keita sin dejarla caer. El resto del equipo tampoco ayudaba en la parcela defensiva, permitiendo a Salah marcharse muy fácil de Carrasco, Lemar y Koke para golpear en la frontal y tras tocar Milner abrir el marcador muy temprano. Es más, el Cholo preparaba una modificación de toda su zaga con Lodi listo para sustituir a Kondogbia a los 35 minutos hasta que Griezmann puso el empate y el cambio se paró hasta el descanso, cuando Giménez sustituyó al centrocampista.

No necesitó el Liverpool generar apenas llegadas para conseguir tres goles. Oblak miraba incrédulo como un balón bombeado sin peligro aparente desembocaba en el penalti que Salah convertía engañando al esloveno. Si el Liverpool tenía pesadillas por su actuación en Anfield en 2020, en esta ocasión apenas pudo intervenir y fue Alisson el designado como MVP del partido después de haber desbaratado varias intentonas del Atlético. Cuando el equipo rojiblanco parecía noqueado y hecho un flan atrás, en ataque comenzó a hilvanar jugadas a partir de encontrar a Lemar, ver el crecimiento de João Félix, De Paul, Carrasco y Koke y los grandes movimientos de Griezmann como falso '9'. El francés tuvo tiempo de lograr dos goles antes de ser expulsado y gozó de un mano a mano tras un gran envío de De Paul que no pudo convertir ante Alisson.

Tampoco Carrasco atinó ante el guardameta brasileño de nuevo asistido por el argentino en una jugada que hubiese supuesto el 3-2 minutos antes de la roja del francés. Lemar fue otro de los que probó los guantes de Alisson y João Félix pudo marcar tras un fantástico control en carrera y un zurdazo que acabó atajando el portero en dos tiempos. Si contra el Barcelona se había encontrado la mejor versión del portugués, también ante el Liverpool dejó minutos de gran nivel, pidiendo el balón, asistiendo a Griezmann en el segundo gol tras una gran acción individual y queriendo ser protagonista. Los jugadores de ataque del Atlético conectan, empiezan a encontrarse y a sentirse cómodos, pero el buen nivel ofensivo fue insuficiente por los errores y una debilidad defensiva atípica en el Atlético, pero que se está convirtiendo en un mal más habitual esta temporada, cuando el equipo rojiblanco ha salido varias veces dormido y poco intenso hasta ser castigado por ello.