El Castilla sucumbe en Cornellà
Un gol con veneno de Chiki en el minuto 89 acabó con el buen partido del filial de Raúl. Los chavales blancos reclamaron un penalti claro por mano en el minuto 7.
Raúl tiene un problema cuando se lleva al Castilla de visita. Cuatro salidas lejos del calor del nido de Valdebebas, cuatro varapalos. El último ayer con un 1-0 en Cornellà en el tramo que más daño puede hacer, los cinco minutos finales, aunque el filial blanco hizo para que su destino no fuera tan funesto pero se la pegó una y otra vez con Anacker.
También se topó con la puerta cerrada de Cambronero González. El trencilla no estimó como penalti una clara mano en el minuto 7 de Rulo en un córner. Polémicas a un lado, el Castilla pagó la novatada por exceso de chavalería (jugaron cuatro juveniles, Marvel, Rafa Marín, David González y Pau Ferrer) y el Cornellà, como bien sabe el Atlético en carne propia, es un hueso. Reforzado además por los paradones de Anacker a un zurdazo de Jardí en el minuto 50 y otro ocho minutos más tarde a un misil de Aranda, que además no atinó después con la más clara en el último momento, el de la verdad, con toda la portería para él.
Sí que lo hizo cuando el partido moría el escurridizo Chiki que clavó el 1-0 con el lujo de pegarle exterior. Veneno con lentejuelas y el Castilla, otra vez de vacío cuando tiene que buscarse la vida lejos del hogar. Ahí tendrá su próxima cita, el MiniClásico contra el Barça B en el Di Stéfano.