Koeman, en manos de Gavi
El técnico neerlandés dará continuidad al joven talento de La Masia tras la confirmación de las bajas de Pedri y Frenkie de Jong en el mediocampo.
Que un chaval de 17 años sea el único motivo que tiene el equipo para agarrarse al equipo deja bien patente las pocas expectativas que está levantando el Barcelona en este inicio de temporada. Y es que Pablo Martín Paéz Gavira, más conocido como Gavi, es una de las pocas alegrías que está teniendo el culé en estos primeros compases del curso. Su aparición en escena no ha podido ser más meteórica: aterrizado al primer equipo prácticamente sin pasar por el filial, se rompió la cara literalmente en la pretemporada, teniendo que jugar con máscara sus primeros partidos oficiales, debutando en LaLiga con 17 años recién cumplidos, siendo el jugador más ovacionado en su estreno en la Champions ante el Bayern y destacando por encima del resto el pasado jueves en su primer partido como titular ante el Cádiz.
Este domingo estará otra vez en el once. Y no sólo porque se lo ha ganado a pulso sino porque Koeman cuenta con dos bajas importantes en el mediocampo: Frenkie de Jong, sancionado, y Pedri, lesionado. El primero finalmente no obtuvo el perdón del Comité de Competición, pese a las alegaciones del club a la segunda amarilla, mientras que el segundo aún está acabando de recuperarse de una lesión en el cuádriceps de la pierna izquierda y es seria duda de cara al partido de Champions ante el Benfica.
Así pues, del teórico triunvirato titular, sólo ‘sobrevive’ el incombustible Sergio Busquets, por lo que el entrenador holandés tendrá que improvisar un nuevo mediocampo. Todo apunta que será Sergi Roberto quien acabe acompañando a Busquets y Gavi, ya que Riqui Puig sigue sin contar con la confianza del holandés.
Pero el partido ante el Levante, aparte de la continuidad de Gavi, tiene todos los números de pasar a la historia por ser el regreso de Ansu Fati tras diez meses de baja. Evidentemente, su entrada a los terrenos de juego se realizará de forma progresiva y paulatina, por lo que en el mejor de los casos se espera que juegue unos 15 minutos. Pero, sin duda, su reaparición será una bocanada de aire fresco para una afición totalmente desencantada por la mala imagen y los malos resultados del equipo en este inicio de temporada.