Aprobados y suspensos del Barça: Araújo, en el cielo; Busquets en el suelo
El capitán tuvo una noche difícil. Demir decepcionó profundamente y Gavi dio la asistencia del gol. Memphis y Luuk de Jong, fallones con el gol.
Koeman volvió, como era previsible, al 4-3-3, con una defensa jovencísima sin Piqué y con Memphis como delantero centro. Pero ese dibujo fue variando durante el partido hasta acabar con Memphis, Luuk de Jong y ¡Piqué! como delanteros, con Dest y Mingueza abiertos a las bandas y apenas dos defensas, Eric y Araújo, que también se fueron hacia arriba. Este fue el uno por uno de un impotente y aciago Barça.
Ter Stegen. Sigue sin aportar nada positivo al equipo. Le llegaron una vez y vio pasar de largo el centro de Escudero, que Duarte remató a placer.
Dest. Le puso voluntad, sobre todo cuando jugó por la banda izquierda. Le falta calidad pero en partidos así, al menos tiene protagonismo. Insistió e insistió, pero no llegó a dar nunca el pase decisivo. Competitivo.
Èric Garcia. A la sombra de Araújo. Aprobado, sin más.
Araújo. El mejor del Barça. Brutal. Firme en defensa, donde se multiplicó y arriesgó para anticipar, se acercó al gol en un par de ocasiones en la primera parte, que acabó como delantero centro. Luego, en la segunda, marcó el gol del empate y acabó haciendo un despliegue como extremo derecho. Jugó por tres.
Balde. Debut en Liga. Va muy bien hacia delante. Le faltó toque en los centros. Se marchó lesionado con problemas en la espalda
Busquets. Noche negra. Falló en la marca de Escudero en el 0-1 y además le faltó acierto en el pase, físico... Superado por momentos, también es un jugador que necesita socios y aquí y ahora no los tiene.
Sergi Roberto. Estrelló un balón en el palo en el minuto 18. Ni suerte tiene. Koeman lo quitó al descanso para que la brecha con la afición no se hiciese mayor. Aprobado, sin más.
Frenkie de Jong. Le puso un poco de amor propio en la segunda parte, en la que hizo lo que se le pide a un jugador que marca diferencias como él. Tratar de romper líneas. Decepcionante en el primer tiempo. Un jugador que le cuesta 90 millones de euros a un club debe hacer mucho más. Y la temporada pasada demostró que podía hacerlo.
Demir. Muy poquita cosa. No se atrevió, no tiene mucho recorrido para jugar de extremo y realmente no fue amenaza para el Granada. Decepcionante. En cualquier otro caso, no habría sido titular en un partido en el Barça.
Memphis. Gaseosa. Intentos pero poca definición. Además, malgastó algunas oportunidades claras. En algunas estuvo lento para disparar y en otras le faltó puntería. Es un jugador de mucho nivel, pero sin alcanzar la condición de crack.
Coutinho. Sesenta minutos para el brasileño. Lo de siempre. Amagos del jugador que luego no demuestra ser.
Sustituciones
Mingueza. Competitivo. Llegó y llegó por la derecha. Es demasiado impulsivo. Vio una amarilla y se jugó la segunda pero, en estos tiempos de miseria, al menos tiene amor propio y sabe qué significa jugar en el Barça.
Gavi. Dio el pase del gol. En esa locura, y con casi cinco delanteros, es difícil entrar en un juego de equipo, más para un pequeñito como él. Pero siempre que sale aporta.
Riqui Puig. Muy poca cosa. Hasta perdió algún pase horizontal y extravió un cambio de juego hacia Dest. También resultó difícil para él entrar en un partido que estaba para centros desde las bandas y remates.
Piqué. Clave en la jugada del gol. Jugó de delantero a la vieja usanza, en este Barça desconocido.
Luuk de Jong. Falló un gol que era más fácil de meter que de tirar arriba. Luego amagó con hacer una chilena, no se atrevió y el público hizo chanza con el episodio. Tiene sentido del juego pero físicamente va muy justo y, si vino para hacer goles en partidos así y no lo consigue, no valdrá de nada.