Un SOS a Ansu Fati
El Barça reclama desde todos los niveles, del banquillo a los compañeros, su retorno para que Memphis pueda tener un acompañante y haya más profundidad.
Una de las conclusiones que se pudo sacar del partido ante el Bayern es que el Barça no muerde. Por primera vez en su historia en la Champions League el equipo blaugrana acabó el partido sin disparar entre los tres palos. Ronald Koeman sólo pudo alinear a dos delanteros: Memphis y el recién llegado Luuk de Jong. ¿El motivo? Eran los únicos de que disponía. Al final del partido, tanto desde el banquillo como desde el vestuario se reclamó como fundamental el regreso de Ansu Fati.
Koeman afrontó el partido ante el gigante alemán con una nómina de lesionados en la línea atacante que mediatizaba la alineación. Braithwaite fue el último en caer y deberá ser operado y no se espera su retorno hasta el año que viene, Dembélé sigue de baja tras su lesión de la Eurocopa con Francia, Kun Agüero aún no ha debutado tras lesionarse en el sóleo el día antes de presentarse en el Gamper. Per por encima de todos ellos, el SOS se lanza en busca de Ansu Fati, el jugador que hace dos temporadas apareció como la luz a la que aferrarse en ataque y que después de una serie de malas decisiones médicas lleva ya 10 meses en el dique seco.
El jugador ha empezado ahora a hacer trabajo con el grupo, pero no se le espera hasta octubre después de sufrir un nuevo frenazo en su recuperación.
Quien más o quien menos dentro del club había puesto en rojo en el calendario la fecha el lunes 20 de septiembre, cuando el Barcelona juega en casa ante el Granada, como la ideal para volver a ver de nuevo al joven delantero en un campo de fútbol. En este sentido, TV3 el miércoles apostaba por esta circunstancia.
Según puso saber AS hace una semana, la prudencia que están gestionando tanto los médicos como los técnicos la recuperación del joven delantero se ha unido una ralentización de la rehabilitación en los últimos días, que ha obligado a poner el freno de mano sobre las expectativas iniciales.
La prueba irrefutable de que a Fati aún le queda camino por recorrer para recibir el alta es que no estuvo en el amistoso que jugó el equipo el pasado miércoles ante El Prat. Una ausencia justificada en el seno del vestuario porque Ansu "aún tiene que sumar muchos más entrenamientos para jugar".