El Depor no tiene freno
Cómoda victoria del Deportivo con goles de Quiles, Miku y Noel ante un voluntarioso pero inocente Calahorra. Los coruñeses, líderes con pleno de triunfos.
El Deportivo visitaba al Calahorra con la misión de demostrar que su gran inicio de liga no había sido casualidad, que hay cimientos y calidad para pelear desde arriba por el único objetivo que se contempla en A Coruña, ascender. Y las dudas que pudieran existir tardaron un suspiro en volatilizarse. Concretamente seis minutos, que fue lo que necesitó Quiles para abrir una cuenta que ampliaría media hora después Miku y rendodearía el juvenil Noel en el descuento. Demostración de pegada en un área, mientras en la otra las tablas de la defensa y la enorme seguridad de Mackay hicieron en resto. Tres partidos, nueve puntos, nueve goles a favor y ninguno en contra. Contundentes razones de un líder que no frena. Todo lo contrario le sucede a un Calahorra que después de tres jornadas solo ha sumado un punto y, pese a la alegría que pone en su fútbol en cada partido, ya está metido en el pozo de la clasificación.
La tarde arranco con sorpresa en el once de Borja Jiménez. Dos fijos hasta ahora, Villares y William, fueron relevados por De Vicente y Doncel, mientras que en el lateral derecho el extremo Víctor García sentó al especialista Benito. Tres cambios a los que se unió el de Trigueros por un Jaime que se lesionó en el calentamiento. Docampo, por su parte, presentó una novedad: Madrazo por Soto. Lo que no varió fue la contundencia del Deportivo. Si la semana pasada tardó siete minutos en abrir el marcador en Tudela, esta tarde fueron seis. Pared entre Doncel y Quiles que el delantero andaluz no perdona con un zurdazo seco y raso dentro del área. Pura contundencia.
El golpe no asustó al Calahorra, que con personalidad siguió confiando en su fútbol combinativo, y tuvo el empate Vicente a los 11’, pero como ante el Tudelano, apareció la mano milagrosa de Ian Mackay. Insistieron los riojanos, pero enfrente había oficio y seguridad, precisamente la que le faltó a la defensa local en una imperdonable pérdida en la salida de balón. Esta vez Quiles no resolvió a la primera, pero el balón llegó a Miku, que en posición ajustada solo tuvo que empujarla a la red a los 34 minutos. Este segundo mazazo si lo sintió el Calahorra, que casi lo paga con un nuevo tanto de omnipresente Quiles antes de llegar el descanso.
Sin gran sufrimiento
El segundo tiempo comenzó más tranquilo, con un Deportivo que poco a iba quitándole el balón a los locales. De ello se dio cuenta Docampo, que en el minuto 57 realizó un triple cambio en su frente de ataque con la entrada de Jorge Martínez, Álex Arias y Soto intentando revolucionar el partido y buscar el milagro. Tomó aire el Calahorra, lo que unido a un Depor que comenzaba a mirar el marcador y el crono, permitió a los riojanos volver a pisar con asiduidad área rival, sobre todo a base de centros laterales. Jorge Martínez se convirtió en un incordio y Ugarte llegó a rematar a la parte exterior del larguero. Vanos intentos ante un Depor que le puso la puntilla con el 0-3 del canterano Noel en el minuto 93 tras una gran jugada de Aguirre. Borche de oro a una tarde de oro.