NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ATLÉTICO DE MADRID

El agujero que deja Saúl al Atlético

El '8' ha perdido la condición de indiscutible para Simeone, pero aun así le ha solucionado multitud de problemas y nunca ha dejado de tener peso en el equipo.

Saúl, durante el Atlético-Elche
INMA FLORESDIARIO AS

El futuro de Saúl Ñíguez está cada vez más cerca de Inglaterra y eso, a menos de una semana del cierre de mercado, obliga al Atlético a moverse para sustituirlo de forma inmediata. El ilicitano había perdido su condición de indiscutible para Simeone, pero nunca ha dejado de tener peso en el equipo y de solucionar constantes problemas. Por eso su marcha abre un agujero en la plantilla que no será fácil de cubrir con una pieza.

El Cholo ha reconocido siempre que una de las virtudes que más valora del ‘8’ es su polivalencia. "Saúl llegó a ser Saúl por jugar en todos los sitios", explicó a As el 20 de julio. Su capacidad para adaptarse, incluso dentro de un mismo partido, a diferentes posiciones y situaciones del juego. Aunque no es algo que entusiasme al futbolista ni a parte de su entorno. Y de cara al futuro, no es algo que puedan ofrecer muchos jugadores de la plantilla.

Saúl es centrocampista y como rojiblanco ha jugado en todas las posiciones del medio. Como el hombre más defensivo, como llegador, como interior y en ambas bandas del 4-4-2. También ha formado como lateral izquierdo y, en este sistema de tres centrales, ha ocupado el carril izquierdo. Este último ha sido su puesto en las dos primeras jornadas de Liga.

Y no es sólo una cuestión posicional. Saúl aporta muchas soluciones al equipo en el campo. Por ejemplo, con su disparo lejano. El de Elche ha deleitado a la afición rojiblanca con grandes goles desde fuera del área. Otra virtud que le ha dado puntos ante Simeone es su fortaleza en el juego aéreo. No sólo para rematar jugadas a balón parado, sino para defenderlas o, por ejemplo, para pelear los envíos largos y aéreos de Oblak y los zagueros.

Es decir, si se concreta la marcha de Saúl, quedará un hueco en el centro del campo y otro en la banda. Más todos los ‘por si acaso’ que tapaba un jugador potente que, llegado el caso, podría ejercer como central o como acompañante del punta. Y en el mercado no hay muchas piezas similares. Saúl, sin ser el Saúl de siempre, deja un buen agujero en el Atleti…