Emociones a flor de piel en la vuelta al Metropolitano
Los minutos previos al encuentro entre el Atlético de Madrid y el Elche fueron una sucesión de homenajes y recuerdos que pusieron de pie un público que volvía a las gradas.
En el día que la afición rojiblanca volvía a las gradas, después de un año y cinco meses vacías, había mucho que celebrar y muchas personas de las que acordarse. Casi 27.000 hinchas teñían las gradas de rayas rojiblancas. Un título de Liga sobre el césped. 379 claveles rojos y blancos, uno por cada socio fallecido. Un himno interpretado por el violinista Pablo Navarro. Y muchas emociones a flor de piel.
El socio número 1 del Atlético, Pedro Palmero, junto al capitán, Koke, ofrecieron el título de Liga a una afición entregada al grito de "campeones Oe". Los jugadores del Elche también quisieron ser parte de este homenaje al campeón. Saltaron al campo y formaron un pasillo para reconocer el campeonato liguero conseguido por los rojiblancos.
Después, Simeone y Koke colocaron una ofrenda floral formada por 379 claveles rojos y blancos. Cada uno de ellos rendía homenaje a los socios fallecidos durante la pandemia. Un gesto al que la afición respondió coreando "Atleti, Atleti". Acto seguido, el violinista y atlético, Pablo Navarro, interpretó el himno del Atlético de Madrid acompañado de un respetuoso minuto de silencio por parte de los aficionados.
En las gradas, se mezclaba la alegría por la vuelta y la consecución del título con la emoción por todo lo vivido este último año y medio. Pero en cuanto comenzó a rodar el balón la grada estalló de júbilo. Había vuelto el fútbol al Metropolitano, pero, sobre todo, había vuelto la gente a su asiento en la grada.