ATLÉTICO
Gil Marín: "Es bueno que los clubes busquemos ser más fuertes y solventes"
El Consejero Delegado del Atlético valoró el acuerdo de LaLiga con CVC y aseguró que el "crecimiento tan grande en la última década en derechos de televisión se va a ralentizar"-
Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado del Atlético de Madrid, expresó este viernes a EFE sobre el acuerdo entre LaLiga y CVC que es "bueno que los clubes" busquen "ser más fuertes, más solventes y más competitivos a través de una Liga más fuerte" y aseguró que el "crecimiento tan grande en la última década en derechos de televisión se va a ralentizar" en el futuro.
"Se habla mucho sobre este asunto desde el desconocimiento, sin rigor alguno. Se habla más en función de con quién te sientas más identificado o vinculado que de las consecuencias de la operación. Creo que es bueno que los clubes busquemos ser más fuertes, más solventes, más competitivos a través de una Liga más fuerte. Y por ello creo que es bueno que LaLiga contrate a los mejores profesionales en cada área de trabajo y se asocie con aquellos que nos puedan ayudar a crecer", valoró en declaraciones a EFE.
"Estar bajo el paraguas de una liga fuerte nos permite ser más competitivos, más solventes, tener más valor como marcas. Y ello nos permite poder ofrecer mejores instalaciones y mejores servicios y productos a nuestros aficionados", abundó el máximo dirigente del Atlético de Madrid y vicepresidente primero de LaLga.
Gil Marín expuso que el acuerdo con CVC ofrece "dos cosas fundamentalmente"; "por un lado, dinero para que los clubes mejoren sus instalaciones con el fin de que puedan ofrecer más y mejores servicios a sus aficionados, así como herramientas para el desarrollo digital de los clubes".
"La sinergia entre LaLiga y CVC potenciará un aspecto fundamental para el futuro de nuestro sector, los datos. Un sector como el nuestro, deporte y entretenimiento, necesita conocer a sus seguidores. No vale con saber cuántos seguidores tenemos, necesitamos saber quiénes son, con el fin de poder personalizar nuestras ofertas, lo que conlleva optimizar el ingreso en los clubes y la satisfacción en los aficionados. Segmentar bien a nuestros seguidores nos permitirá ser más eficaces y hacer más felices a nuestros aficionados", declaró en ese sentido.
Y "por otro", el acuerdo ofrece "experiencia en la explotación de los derechos de competiciones, así como sus ganas e ilusión por mostrar, al mundo en general y a los clubes en particular, su capacidad para optimizar el valor de los derechos de LaLiga, y con ello el valor de los clubes".
¿Y qué supone este acuerdo para el Atlético de Madrid? "A día de hoy, los derechos audiovisuales que gestiona LaLiga representan para el Atlético de Madrid un 30 por ciento de sus ingresos ordinarios, excluyendo el mercado de jugadores. Es decir, la merma que tendría el Atlético de Madrid en el futuro, si los ingresos fueran los actuales, sería de un 3 por ciento", expuso.
"Creo sinceramente que ese 3 por ciento el Atlético de Madrid lo recuperaría por dos vías; la primera, vía LaLiga, como consecuencia del incremento del valor de los derechos gracias a la sinergia con CVC, y la segunda vía por la rentabilidad de la inversión que el Atlético de Madrid llevaría a cabo con ese dinero en una nueva infraestructura, que permitirá al club ofrecer a sus aficionados una verdadera ciudad de deporte y entretenimiento", valoró Gil Marín.
En ese sentido, en cuanto a cómo evolucionarán los ingresos de los clubes a futuro, expresó que el "crecimiento tan grande en la última década en derechos de televisión se va a ralentizar". "Creceremos, aunque más moderadamente, gracias a las nuevas experiencias para los abonados a las televisiones de pago, experiencias que serán posibles gracias a la tecnología. La tecnología permitirá disfrutar del espectáculo de otra manera, casi como si cada espectador fuera protagonista directo del partido".
"Yo creo que los mayores crecimientos vendrán derivados de fuentes alternativas a los derechos de televisión que gestiona LaLiga: competiciones UEFA post 24, experiencias de los aficionados tanto presenciales los días de partido como 'on line' los 365 días del año, y por último acuerdos comerciales vinculados a empresas que ofrecen productos 'on line'", continuó.
"Por ello, creo que el porcentaje de merma que tendremos los clubes que nos adhiramos al proyecto LaLiga-CVC representará cada año un menor importe respecto al ingreso total anual de cada club", explicó Gil Marín.
También abordó la existencia de bandos en el sector del fútbol: "Por supuesto que existen. Y creo que pocos pueden valorar el daño que se le hace al sector en general y a los clubes en particular. Los clubes tenemos una dependencia directa de aquellos organismos que gestionan parte de nuestros derechos. Y esto es lo que genera el principal problema en el sector".
"Por ejemplo, el Atlético de Madrid tiene una dependencia clara de LaLiga y de UEFA, pues estas dos instituciones gestionan casi el 65 por ciento de sus ingresos ordinarios. ¿Por qué discute la Real Federación con LaLiga? Por las competencias sobre nuestros derechos y el dinero que esos derechos representan", repasó.
"¿Por qué discute UEFA con FIFA? Por la competencia en la organización de competiciones que utilizan a nuestros jugadores. La diferencia es que UEFA reparte un porcentaje muy alto de los ingresos con los clubes que forman, invierten y aportan los jugadores, y FIFA sólo destina una parte muy reducida de sus ingresos a los clubes", continuó.
"La búsqueda permanente de más partidos para generar más ingresos por parte de FIFA y la Federación está provocando un efecto nocivo en los clubes y sus jugadores. La Federación necesita, dentro de sus competencias, optimizar al máximo las competiciones que organiza, tanto a nivel de selecciones como de clubes, Copa del Rey y Supercopa, para incrementar sus ingresos", añadió.
"FIFA hace lo mismo con las competiciones que organiza, tanto de selecciones como de clubes; prueba de ello es la pretensión actual de organizar un Mundial de Clubes con un mayor número de clubes y cada dos años. Esta búsqueda permanente de más partidos para tener más ingresos para tener más poder lleva al escenario de que los jugadores lleguen a jugar más de 50 partidos por temporada, en algunos casos más de 60, y que los clubes nos sintamos desprotegidos al tener la obligación de aceptar que nuestros jugadores, a los que formamos y pagamos, se vayan a jugar partidos para terceros, en los que apenas recibimos contraprestaciones económicas, y que provoca cansancio y lesiones", concluyó.