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BETIS

Una alianza con el Villamarín

El público volverá a Heliópolis en partido oficial casi un año y medio después. Pellegrini confía en que sirva de incentivo para la cita ante el Cádiz.

Actualizado a
Los jugadores del Betis celebran un gol ante la Roma.
AFP7 vía Europa Press

El Benito Villamarín volverá a contar con público en sus gradas en un partido oficial tras un año y medio sin poder hacerlo. El choque ante el Cádiz tendrá a 23.745 abonados del Betis en las gradas de Heliópolis como aliciente añadido y Manuel Pellegrini espera que suponga un incentivo de altura para su equipo desde este mismo viernes. El técnico chileno es uno de los que deseó con más fuerza el retorno de los aficionados a los estadios de fútbol y aún no vivió la experiencia de liderar el banquillo bético con aficionados en sus gradas durante un choque oficial. A las puertas del primer duelo en casa de la temporada, Pellegrini espera que el efecto público contribuya al buen nivel de sus jugadores para buscar el primer triunfo del curso.

Los aficionados del Betis respondieron a las expectativas ante la opción de pedir entradas para el partido. Tras el permiso oficial de tener el 40% de aforo para este choque, el club informó que 436 abonados se quedaron sin poder ver el choque en el Villamarín pese a pedirlo al haber más demanda que las 23.745 plazas disponibles. Ya habían respondido los hinchas también a la hora de renovar sus abonos durante las pasadas semanas y reflejar las ganas de que la normalidad pueda regresar al fútbol española. El choque ante el Cádiz será especial tras casi un año y medio sin espectadores en el feudo verdiblanco.

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El último partido de Liga con aficionados en el Villamarín fue el jugado hace dos campañas ante el Real Madrid y que terminó con triunfo verdiblanco por 2-1. No fue la temporada deseada por los aficionados, que sin embargo tienen ahora la esperanza de que la buena mano de Pellegrini al frente del equipo pueda dotar de más consistencia al equipo con miras a cumplir los objetivos como el pasado curso y entregar alegrías a la parroquia bética. El técnico quiere que arranque una nueva alianza entre el Villamarín y su equipo a sabiendas que el factor aficionado puede ser muy importante en los desafíos que tiene puestos a corto y medio plazo.