Un empate con sabor a victoria
El Ibiza da la talla en su debut en LaLiga Smartbank ante el Zaragoza. Los isleños muestran solvencia defensiva pero necesitan mejorar en ataque.
La UD Ibiza debutó este viernes en LaLiga SmartBank y lo hizo arrancando un empate a cero frente al Real Zaragoza, una igualada que sabe a victoria por la imagen ofrecida por el conjunto entrenado por Juan Carlos Carcedo. Los celestes, que vistieron de azul oscuro con su segunda equipación, fueron sólidos en la parcela defensiva pero les faltó puntería en ataque.
Las señas de identidad del bloque de Carcedo no han cambiado un ápice a pesar del salto de categoría. Al menos en la retaguardia. El Ibiza fue un equipo compacto, con apenas fisuras defensivas y que concede muy poco. Germán, que el curso pasado sólo encajó nueve goles en toda la temporada oficial y diez el equipo, no tuvo apenas trabajo, ante un Zaragoza sin mordiente ofensivo.
La defensa de los pitiusos fue la misma tantas veces titular en la campaña del ascenso a Segunda. Los laterales Fran Grima y Morillas, y los centrales Goldar y Rubén, rayaron a gran altura. Estos dos últimos, incluso, gestionaron muy bien la amenaza de haber visto una tarjeta amarilla cada uno, lo que les obligaba a ser más cautos ante la falta de centrales del equipo, una posición que seguramente se reforzará en lo que queda de mercado de fichajes.
En el medio campo, la pareja de pivotes formada por Manu Molina y Javi Pérez derrochó calidad y seguridad para sostener al equipo. Cifu jugó por el costado derecho y cumplió (pudo hasta marcar). Lo mismo que Bogusz por la izquierda, aunque el polaco probablemente dé más con el paso de los partidos. Mientras, Ekain derrochó trabajo, igual que Castel en la punta de ataque, aunque el delantero madrileño estuvo muy solo y no le llegaron balones para rematar.
Entre los cambios, sólo el de Appin dio algo más al Ibiza, aunque algunos como Javi Lara o Rodado no tuvieron tiempo de demostrar nadar. Mientras, el pivote francés incluso pudo marcar en un disparo lejano.
David Morillas, uno de los veteranos del equipo ibicenco, manifestó tras el encuentro que las sensaciones eran "muy buenas". "Hemos competido el partido y lo hemos llevado donde queríamos. Creo que hemos estado bien físicamente, a pesar del calor y de que era el primer partido de Liga", comentó el defensa, que dejó claro que esa era "la actitud" que debe demostrar el Ibiza. "El equipo ha hecho un partido encomiable", sentenció Morillas en declaraciones recogidas en los canales oficiales del club ibicenco.
Mientras, Juan Carlos Carcedo también hizo una lectura positiva en la rueda de prensa oficial. "Una de nuestras virtudes el año pasado fue que éramos un equipo compacto, difícil de ganar y que no nos marcaban muchos goles. En esa línea intentamos seguir este año. Evidentemente, es una categoría diferente y posiblemente nos costará más. Pero nos vamos contentos por esa solidez. Creo que el equipo no ha sufrido demasiado. En cualquier partido hay sus momentos, pero hemos sabido pasarlos. Ha habido momentos en los que hemos tenido la posesión y les hemos hecho correr y trabajar", comentó el preparador de La Rioja, que pidió en la previa a sus jugadores que fueran descarados. Obedecieron a su técnico.