Mariano, tres años en el limbo
El delantero cumple 28 años inmerso en un verano en el que tiene de nuevo colgado el cartel de transferible en el Real Madrid.
Mariano celebra hoy domingo su 28º cumpleaños sumido en la travesía del desierto que está siendo esta segunda etapa para él en el Madrid desde que volvió hace tres años. El delantero afronta su cuarta temporada tras su regreso sin que haya cambiado la perspectiva respecto a anteriores veranos, en la que el club le mantuvo la puerta abierta sin que finalmente se materializara su marcha. Un panorama lejano al que se planteaba cuando el Madrid lo repescó del Lyon tras una deslumbrante campaña en la Ligue 1.
En estos tres años Mariano apenas ha participado en 48 partidos con la camiseta blanca. Sólo ha sido titular en 11 de ellos y en la mitad no superó el cuarto de hora sobre el césped. El buen hacer de Benzema, la falta de confianza de Zidane, las recurrentes molestias y lesiones que ha sufrido y sus pobres actuaciones le han lastrado.
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Apenas ha destilado unos fogonazos. Le marcó un tanto al Barça que sentenció el Clásico en el último gol que cantó el Bernabéu antes de la pandemia. Le sirvió para reivindicarse, pero en las oportunidades que ha tenido posteriormente no ha mostrado continuidad. En 17 meses sólo ha marcado otro gol, al Villarreal en noviembre de 2020, pese a que con la salida de Jovic disfrutó de un buen puñado de minutos en la segunda mitad de la campaña pasada.
Aunque tiene colgado el cartel de transferible, sus números, seis goles en estos tres años, han rebajado mucho su caché. Los 22 millones de euros en que le tasaba Transfermarkt en 2018 han quedado reducidos a menos de la mitad. Su valor de mercado ahora no pasa de los 10 M€. Aparte de su rendimiento reciente, el económico es otro aspecto que dificulta su salida y ahuyenta a potenciales pretendientes. El Madrid pagó 22 millones de euros al Lyon para ejercer su derecho de tanteo y evitar que fichara por el Sevilla. Cualquier venta por menos de 9 millones hoy por hoy apuntaría pérdidas en las cuentas del club. Su salario también ha sido disuasorio. Pese a que ha habido ofertas por él estos dos últimos veranos, ningún club estaba dispuesto a pagarle los 4,5M netos que cobra en el Madrid.